El Consejo de la Juventud de Extremadura (CJEx) ha demandado, de cara al próximo curso, que las prácticas estudiantiles sean de calidad, que no se cometan abusos con los quienes las realizan y que se evite el fraude de este proceso de formación en las empresas.
En un comunicado, ha apoyado también las medidas en las que trabaja el Consejo de la Juventud de España (CJE), que ha colaborado en la creación del Estatuto de Estudiantes en Prácticas junto a la Oficina Precaria para garantizar derechos y una calidad mínima en todas las becas de formación práctica externa.
Así, ha explicado que las prácticas académicas en empresas u otro tipo de organizaciones son de carácter formativo para que el estudiante “pueda desarrollar lo aprendido en un ámbito de trabajo y conocer de cerca el ejercicio profesional”.
Sin embargo, en “numerosas ocasiones” a sus beneficiarios se les trata y exige como a trabajadores con contrato aunque su beca consiste “en una relación no laboral y, por lo tanto, sin derechos laborales”, ha añadido.
Otro de los problemas formativos detectados, ha dicho, es que la tutorización de este proceso en algunos casos está saturada, por la cantidad de estudiantes que dependen de la misma tutoría, e incumplida porque no existe un seguimiento real de lo enseñado por parte de los responsables.
Además, la mayoría tampoco gana dinero a cambio de sus prácticas porque su relación no es contractual “aunque en numerosas ocasiones pueda parecerlo”, ha afirmado el organismo representante de las personas jóvenes extremeñas.
En el conjunto nacional, la asignación económica de las becas formativas en el sector empresarial depende de la voluntad del sitio en el que se desempeñan las prácticas y sólo es obligatorio dar de alta en la Seguridad Social a quienes reciban alguna remuneración.
En este sentido, ha subrayado que, según las últimas cifras ofrecidas por la Tesorería del Estado, sólo 79.500 personas becarias estaban dadas de alta en España.
Por esto, ha incidido en la necesidad de vigilar que las prácticas externas no sean “mano de obra barata” para empresas y organización.
Por último, ha afirmado que el CJE, junto con la “Oficina Precaria”, han trabajado en el Estatuto del Estudiante Precario, un documento que recoge una serie de propuestas para asegurar derechos y una calidad mínima en todas las prácticas estudiantiles externas.
Entre ellas, ha destacado la propuesta de configurarlas únicamente como asignatura de la carrera, de manera que “para hacer prácticas extracurrículares fuera necesario hacer un contrato en prácticas”.