El presupuesto de Extremadura para el año próximo destina 960 millones de euros para hacer frente a la deuda pública contraída por la Comunidad, entre pago de capital e intereses, un 5,84% más debido a la subida de estos últimos.
Este ha sido uno de los datos aportados por la secretaria general de Hacienda y Administración Pública de la Junta, Inmaculada Núñez Arroyo, quien ha abierto la ronda de comparecencias de altos cargos en el Parlamento autonómico dentro de la tramitación de las cuentas extremeñas para el ejercicio 2024.
Ha informado de las partidas de la Consejería de Hacienda y Administración Pública, y de las secciones de Endeudamiento, 5.161 millones de euros, que supone el 22 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB), y Fondo de Contingencia, que se mantiene en 10 millones de euros.
El presupuesto regional del próximo año asciende a 8.127 millones de euros, 346 millones más que los de 2023, en la que las cuantías más destacadas se destinan a las de carácter social.
Núñez Arroyo también ha señalado que las previsiones de endeudamiento recogidas en el proyecto de presupuestos se cifran en 282 millones de euros menos que en el ejercicio de 2023, un 21,1 por ciento menos.
En cuanto a las entregas a cuenta que Extremadura recibirá del Ministerio de Hacienda, ha recordado que no se incluirán ahora en la fase de tramitación parlamentaria, sino una vez aprobados los presupuestos y se inicie la ejecución.
La secretaria general de la Hacienda extremeña ha señalado que las previsiones de entregas a cuenta que la Junta ha incluido en el proyecto de presupuestos están por debajo de lo comunicado de manera provisional.
Entre las principales líneas de actuación, Núñez ha destacado el incremento de las retribuciones de los empleados públicos “en el importe máximo que permita el Estado”, el abono del nivel IV de la carrera profesional y nuevas medidas de índole tributaria como la reducción de la base imponible en el Impuesto de Sucesiones y Donaciones hasta los 500.000 euros para grados de parentesco I y II