Las organizaciones Apag Extremadura-Asaja, UPA-UCE y La Unión han trasladado este jueves a la Junta de Extremadura la “difícil” y “complicada” situación que tienen para encontrar mano de obra en la región, con el objetivo de que, pese a no ser competencia regional, les ayude en la necesaria solución que se requiere.
Representantes de estas organizaciones se han reunido con el consejero de Economía, Empleo y Transformación Digital, Guillermo Santamaria, y la consejera de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Sostenible, Mercedes Morán. El titular de Economía ha explicado que el objetivo es atender la reclamación que hacen para poder traer trabajadores extranjeros para las labores en el campo, escuchar sus demandas y trasladarlas al gobierno de España, que es el que tiene las competencias.
El consejero ha señalado que es la primera vez que como gobierno se enfrentan a este problema, por lo que lo primero es escucharles y ver como se le puede ayudar. En cuanto al hecho de que en Extremadura hay parados, pero no se encuentren para las tareas agrícolas, ha dicho que es “una de las cosas que hay que afrontar en esta consejería, que las demandas de empresas sean cubiertas con demandantes de empleo”.
Por su parte, el secretario general de La Unión, Luis Cortés, ha dicho que sí hay competencias que si son de la Junta de Extremadura, como las referidas a alojamientos y organización en la traída de los trabajadores extranjeros, por lo que ha demandado que haya coordinación entre la Dirección General de Migraciones y la Junta.
“Las estadísticas pueden decir que hay 8.000 parados en el sector, pero no tenemos gente para la recolección”, ha remarcado Cortés, que ha propuesto la posibilidad de que para la campaña que viene se pueda hacer una especie de prueba, en la que vengan entre 100 y 200 migrantes y con el resultado empezar a trabajar. A su juicio, en estos momento sería inviable traer los 2.000 o 3.000 necesarios porque no hay capacidad organizativa.
Para el presidente de Apag-Asaja, Juan Metidieri, es de agradecer que el consejero “se haya tomado en serio el problema”, pero ha considerado que además de suplir con mano de obra extranjera la fata de trabajadores, “también hay que analizar el sistema”. Ha recordado que su organización lleva mucho tiempo denunciando “que se está subvencionando y dando paguitas por no trabajar cuando hay carencia de mano de obra” y ha defendido que “haya paga para el que está parado de verdad, pero el que no, que esté disponible y se ponga a trabajar”.
En este sentido, Ángel García Blanco, presidente de Asaja Cáceres, ha señalado que esta misma mañana ha intentado contratar a dos trabajadores “y me han dicho que si les daba de alta no venían porque le quitaban 20 euros de la paguita y le hacían pagar los medicamentos”. “Mientras que el señor Pedro Sánchez no sea capaz de compatibilizar el cobro de la paguita con el trabajo no vamos a poder encontrar trabajadores”, ha aseverado.
Por último, Ignacio Huertas, secretario general de UPA-UCE, ha dicho que este es un problema difícil de solucionar y habrá que arbitrar medidas, pero ha precisado que el tipo de explotaciones extremeñas imposibilitan traer a gente a campañas de tres meses, que es lo que se necesita para un contingente, ni asumir los costes de alojamiento. El dirigente de UPA ha apelado a aprovechar la mano inmigrante que ya está en España arraigada, pero que no se puede contratar, y que se les pueda regularizar.
Además, insta a que se depuren las cifras de empleo y se diferencie entre los los activos y no activos “para saber cual es la población disponible y que se necesita, porque las cifras que se dan y las necesidades no casan nunca”.