La Consejería de Educación va a intentar que las aulas en las que se harán el próximo 22 de junio los exámenes para cubrir 819 plazas docentes del proceso de estabilización, reúnan las condiciones climáticas adecuadas y cuenten con aire acondicionado.
“No se puede hacer unas oposiciones en unas condiciones que no sean óptimas”, señala la titular de este departamento, Mercedes Vaquera, sobre el requerimiento realizado por la Inspección de Trabajo a la Consejería para reducir el “estrés térmico” que se podría generar por las altas temperaturas de esas fechas.
Momentos antes de visitar el colegio Nuestra Señora de Guadalupe de Mérida, la consejera ha señalado que se está trabajando “para buscar aulas que reúnan las condiciones climáticas adecuadas, es decir, que tengan aire acondicionado”.
Por otra parte, respecto a las críticas de algunos sindicatos por el adelanto de la convocatoria de estas pruebas a diciembre -tradicionalmente las oposiciones de educación se convocan en primavera-, lo que perjudicará a opositores que no podrán presentar como méritos cursos que están realizando, la consejera ha señalado que “no podemos hacer otra cosa si queremos que todo se desarrolle bien”.
Según ha indicado, “siempre va a haber alguien a quien es le quede fuera cursos formativos porque nuestros docentes están todo el día formándose, afortunadamente”.
Sobre este caso concreto, ha señalado que la fecha del 22 de junio se ha fijado para toda España y que “se ha tenido que hacer cronograma para atrás para que se puedan cubrir todos los horizontes temporales”, lo que lleva a abrir el plazo de inscripción en diciembre.