La Feria Nacional del Queso de Trujillo, que este año cumple su 30 aniversario con una previsión aproximada de 200.000 visitantes, expondrá medio millar de variedades de este producto y tendrá a Holanda como país invitado.
Del 30 de abril al 3 de mayo, la plaza trujillana desprenderá aromas y ofrecerá sabores de quesos de oveja, cabra y vaca en sus modalidades de pasta blanda y pasta dura, azules, cremas y tartas de queso, aromatizados, o acompañados de mermelada, membrillo o pimentón, entre otras variedades; la degustación seguirá costando 0,50 euros.
Los visitantes y profesionales del sector tendrán la oportunidad de acompañar a los quesos con vinos Ribera del Guadiana y cervezas extremeñas.
Más de un centenar de espacios expositores darán cabida a quesos elaborados y procedentes de todas las comunidades autónomas, con especial protagonismo del País Vasco, así como de Francia y Portugal, a los que se suma Holanda como país invitado.
También serán protagonistas los quesos extremeños, especialmente los de las denominaciones “Torta del Casar”, “Queso Ibores” y “Queso de la Serena”, que además serán la base de las Jornadas Gastronómicas en las que participarán 11 restaurante trujillanos.
El alcalde de Trujillo, Alerto Casero ha explicado que a lo largo de estas tres décadas la feria se ha venido centrando en los quesos elaborados con leche de oveja y de cabra al ser los más comunes en el país, de ahí que este año se dé una mayor relevancia a los de leche de vaca, con los que “damos un salto de calidad y lo hacemos con Holanda, el país que mejor trabaja esta variedad”.
Así el país “naranja” aportará una treintena de quesos, algunos de ellos elaborados con leche de la variedad Remeker Purr, cuya materia prima procede de la vaca Jersey, de origen británico y de difícil acceso para el consumidor.
El público asistente podrá participar en actividades complementarias como el taller de elaboración artesanal de queso de cabra, asistir a los conciertos gratuitos de los grupos extremeños Bambikina, Burgim y Rui Díaz & La Banda Imposible, o visitar la II Feria de Artesanía.
De cara al público, se realizará una demostración de cocina a cargo del chef Joaquín Felipe, ganador del premio a la mejor tapa de diseño en el certamen Madrid Fusión 2015 y jefe de cocina del restaurante Aspen de La Moraleja (Madrid).
En la pasada edición alrededor de 175.000 personas visitaron esta feria, en la que se vendieron unas 350.000 degustaciones a un precio de 0,50 euros, el mismo que se fija para este año.