El Consejo de Administración de la entidad ha acordado poner en marcha esta medida, dirigida a aquellos empleados nacidos en 1956, 1957 y 1958, que podrán acogerse a estas bajas voluntarias progresivamente en este 2015, en 2016 y en 2017.
El plan afectará a un total de 612 trabajadores de Liberbank en toda España y su objetivo es “el rejuvenecimiento de la plantilla, por un lado, y el cumplimiento de determinadas expectativas de este colectivo, por otro”.
Según el documento entregado por la entidad a los sindicatos, Liberbank ofrece entre el 75 y el 80 por ciento del salario neto a más de 600 empleados en este plan de bajas incentivadas, que se anunció el pasado 30 de junio.
Las condiciones principales de esta medida son, por una parte, una renta mensual para el empleado hasta que cumpla 63 años de edad, que será equivalente al 60 por ciento de su salario bruto fijo actual, sin reducción de jornada ni reducciones del ERTE, y con unos límites de un mínimo del 75 por ciento y un máximo del 80 por ciento del salario neto que percibiría el trabajador de seguir trabajando.
Del mismo modo, se lleva a cabo el mantenimiento de las condiciones de los préstamos de empleados en vigor y, finalmente, el pago por Liberbank del Convenio Especial hasta los 63 años para el mantenimiento de las pensiones de jubilación de los empleados acogidos al plan.
Fechas de salida
Este plan de bajas voluntarias incentivadas preveía como fechas en las que se materializarían las salidas serían a 31 de diciembre de 2015, los nacidos con anterioridad a 31 de diciembre de 1956; 31 de diciembre de 2016, los nacidos en el año 1957; y 30 de junio de 2017, los nacidos en el año 1958.
El documento indica que las condiciones económicas más relevantes de este plan, comunicadas a los sindicatos, “son homogéneas para todos los beneficiarios y similares a las pactadas en los últimos procesos de bajas en el sector bancario español”.
La ejecución de este plan de bajas incentivadas tendrá un coste estimado, a valor actual, de alrededor de 111 millones de euros, importe que ya está provisionado por LIberbank.
Desde CSIF han valorado esta oferta realizada por la entidad puesto que “es voluntaria” y “todo aquel que quiera acogerse lo podrá hacer”. Además “no afecta” a la cuenta de resultados “puesto que está dotada”.
“Entendemos que es una medida positiva puesto que, si las condiciones son normales y buenas, será aceptada por los trabajadores afectados y el sindicato lo ve bien”.
Por contra el sindicato CSICA ha asegurado que las condiciones que incluye son “paupérrimas”.
CSICA rechaza el plan al considerar que una vez los trabajadores extingan su contrato de trabajo, se enfrentarán a un conjunto de peligros como que no percibirán desempleo o que no habrá exención fiscal alguna.