Extremadura tiene 259 linces a fecha de este pasado viernes, confirmados por seguimiento directo, de los que 117 son machos, 114 hembras y 28 indeterminados, ya que su sexo aún está por confirmar.
Además, han nacido cachorros en todas las zonas, cuyo conteo se podrá realizar en el mes de julio según ha informado la Junta de Extremadura.
La directora general de Desarrollo Rural, María Ángeles Muriel, ha intervenido en la Mesa Público-Privada sobre el Lince Ibérico de Campo Arañuelo, celebrada en Casas de Belvís (Cáceres), con el objeto de diseñar y aplicar una estrategia de desarrollo rural que explore las potencialidades en torno a este felino.
En la reunión han participado titulares de explotaciones ganaderas, empresas, el Grupo de Acción Local Arjabor, alcaldías, así como otras autoridades y técnicos de la Junta de Extremadura.
Durante la jornada, se ha expuesto la importancia de acordar una hoja de ruta a medio y largo plazo para idear una estrategia de desarrollo rural en relación con el lince en dicha comarca, una de las cinco zonas de hábitat de esta especie en Extremadura, que también está presente en Valle Matachel, Zona de Ortiga, Valdecigüeñas y Parque Nacional de Monfragüe.
Así lo ha detallado la directora durante la mesa técnica, en la que ha apuntado que Valdecañas-Ibores es una de las zonas principales donde puede verse este animal, cuya presencia se ha detectado hasta en cinco municipios de la comarca.
Muriel ha valorado el trabajo conjunto de los municipios de la zona para desarrollar un proyecto rural especializado y sostenible, basado en un gran potencial del lugar, como es el lince.
Lo que permitirá no solo conocer su comportamiento, sino también el del resto de animales y especies vegetales que se pueden observar en la comarca, ha añadido.
Además, ha subrayado que las actividades de avistamiento, rutas y otras iniciativas de ocio y turismo que se plantean para esta estrategia han de ser totalmente compatibles y respetuosas con el modo de vida salvaje de este animal.