Los pantanos extremeños de la cuenca del Tajo han caído esta semana por debajo del 50% tras los desembalses realizados en tres de las cuatro presas de aprovechamiento hidroeléctrico, mientras que se han respetado e incluso aumentado las reservas del conjunto de Torrejón (Tajo-Tiétar) en pleno parque nacional de Monfragüe.
También ha perdido un cierto volumen de agua el pantano no hidroléctrico de Gabriel y Galán, según el parte semanal publicado por la Confederación Hidrográfica del Tajo.
En conjunto los 14 embalses cacereños de esa cuenca han perdido 72,81 hectómetros cúbicos y conservan aún unas reservas totales de 3.093,23 Hm3, pasando de un 50,05% de llenado en la semana anterior al 48,9%.
De esos 72,81 hectómetros perdidos, Alcántara ha cedido 38,95, Valdecañas 29,25 y Cedillo 4,06, mientras que Confederación Tajo-Iberdrola (concesionaria de los saltos hidroeléctricos) han alimentado el conjunto de Torrejón (son dos presas conectadas, sobre los ríos Tajo y Tiétar) que ha visto aumentar sus reservas en 15,51 hectómetros.
En total los cuatro pantanos que se dedican a producir electricidad han perdido 56,75 hectómetros, un desembalse claramente inferior al de la semana pasada que fue de 84 Hm3, y al de la anterior, 94.
Cedillo, embalse final del sistema Tajo y el que entrega aguas a Portugal según el convenio de Albufeira, que estaba al 97% de llenado, queda ahora al 95,5%.
El Guadiana, al 29,6%
Mientras tanto las presas extremeñas de la cuenca del Guadiana, en su gran mayoría y sobre todo en capacidad situadas en la provincia de Badajoz, y que fundamentalmente sirven a regadíos y abastecimiento de poblaciones, han perdido esta semana 25,4 hectómetros y quedan al 29,6% (0,3 puntos menos).
Orellana guarda ahora 7 hectómetros menos, Zújar 5, García de Sola 4 y Alange 3, por citar los mayores desembalses hechos.