El Parlamento regional llora la pérdida de 220 millones de euros, pero los partidos se tiran los trastos

La Asamblea de Extremadura, en el primer pleno de la nueva legislatura, ha lamentado largamente los 220,5 millones de euros que han dejado de llegar de Madrid por culpa de no haber Presupuestos estatales nuevos desde enero de 2018, una cifra que es ahora oficialmente precisada por la vicepresidenta primera de la Junta, Pilar Blanco-Morales.

Faltan en las arcas de la Comunidad 134 millones de euros por las entregas a cuenta desde Madrid de nuestra participación en los ingresos estatales, por no haberse actualizado esas entregas desde enero de 2018 cuando entraron en vigor los últimos Presupuestos de Rajoy, que Sánchez decidió mantener y que se han tenido que prorrogar porque las cuentas 2019 del nuevo Gobierno socialista fueron tumbadas en las Cortes.

Por otro lado 86,5 millones de la participación de Extremadura en la recaudación del IVA, al haber cambiado en 2017 el entonces ministro Montoro la forma de liquidarlo, de manera que según Blanco-Morales “nos pagan once meses en lugar de los doce del año”.

La vicepresidenta y consejera de Hacienda y Administración Pública ha emplazado en el debate a PP y Cs a que dejen gobernar en Madrid, para que haya unos nuevos presupuestos que financien mejor a Extremadura y todas las comunidades, y les culpa de este déficit por haber tumbado los presupuestos estatales socialistas de 2019, unas cuentas que corregían la situación.

El debate servía también para reclamar un nuevo sistema de financiación autonómica, caducado el anterior hace cinco años.

Chantaje

Pero lejos de resultar la llamada a la unidad, y a buscar en Madrid una solución para la gobernabilidad del país y mejor financiación de las regiones, los portavoces extremeños de PP y Cs han acusado a la vicepresidenta de chantaje, presionar con su partido al centroderecha para que permita la investidura de Sánchez.

Luis Carrón (PP) ha metido el dedo en la llaga de “recortes” actuales como el retraso en construir el hospital Don Benito-Villanueva, demora en la dependencia, o ahorro en las ayudas a empresas de autobuses con lo que muchas localidades se han quedado sin ese servicio.

Cayetano Polo (Cs) ha reprochado la “sumisión y silencio cómplice” de la Junta con Sánchez, que regaló a los nacionalistas vascos un cupo fiscal, “cuponazo” excesivo: “La culpa de que no haya gobierno es de Sánchez”, por no haber conseguido apoyos.

Por Unidas por Extremadura (UPE) Álvaro Jaén ha lamentado que hace dos años se llegara en el Parlamento regional a un acuerdo unánime para el contenido de un nuevo sistema de financiación autonómica, que Sánchez no ha puesto en marcha en el año que lleva, como tampoco lo hizo anteriormente Rajoy en los cuatro que le tocaron de prórroga del anterior.

Jaén reclama a la Junta una rebelión contra el presidente en funciones del Gobierno.

Jorge Borrella, diputado del PSOE, les ha recordado a PP y CS cómo sacaron adelante un Presupuesto estatal 2018 y se negaron al nuevo previsto para 2019 que proponía, con autorización de Bruselas, relajar el objetivo de déficit con 8.000 millones de euros más en gastos, buena parte de ellos irían a las comunidades y a colectivos como dependientes, parados, etc.