El Pleno del Ayuntamiento de Plasencia va a tener nueva ordenanza municipal que regula la protección del medio ambiente urbano frente a la contaminación acústica, y que contempla multas de hasta 300.000 euros.
Aprobada provisionalmente el pasado viernes, durante 30 días estará en información pública y luego se convertiría en aprobación definitiva
Los niveles de ruido se medirán de distinta forma dependiendo del horario: en la franja diurna que comprende de 8:00 a 22:00 horas, no se podrán sobrepasar los 70 decibelios (dBA) en espacios abiertos, mientras que en horario nocturno de 22:00 a 8:00 horas, habrá un límite de 55 dbA.
En cuanto a los niveles transmitidos al interior de las edificaciones y locales, en horario diurno no se podrán exceder los 50 dBA, mientras que en horario nocturno se limita a un máximo de 40 dBA.
La ordenanza contempla dos tipos de sanciones: multas coercitivas que ascienden hasta 300 euros, a fin de obligar a la adopción de las medidas correctoras; e infracciones, de las que hay tres tipos.
Las infracciones leves son las molestias por ruidos o la reiteración de denuncias infundadas y van desde 180 a 600 euros y la suspensión de la licencia por un mes.
Las infracciones graves tienen que ver con el incumplimiento de los valores límite, no comparecer a una inspección, modificar el número y las condiciones de los equipos, carecer de contrato del limitador-controlador o la comisión de dos o más infracciones leves en el plazo de un año.
Van desde 601 a 12.000 euros y la clausura de la actividad por hasta dos años.
Las infracciones muy graves se dirigen a la comisión de dos o más faltas graves en el plazo de dos años, el incumplimiento de las condiciones establecidas en materia de contaminación acústica o la manipulación de precintos.
Se estipulan desde 12.001 a 300.000 euros, con revocación de la licencia de una a cinco años y la clausura de las instalaciones de dos a cinco años.