El Ayuntamiento de Mérida, gobernado por el PP y presidido por Pedro Acedo, ha emprendido en una de las dos calles más céntricas de la ciudad, Valverde Lillo, una obra para retranquear tres edificios antiguos fuera de alineación y así ensanchar la acera en un total de 171 metros cuadrados; para ello va a gastar según el grupo municipal del PSOE 850.000 euros de forma innecesaria, ya que el plan urbanístico obliga a los propietarios a ceder esa superficie de forma gratuita en el caso de derribar las viejas construcciones para levantar otras nuevas y de mayor altura.
Para colmo las obras están en estos momentos paradas, lo que denotaría según sospecha del PSOE que hay algún problema legal con los propietarios. Ya se ha producido la demolición de uno de los edificicios, donde siguen los trabajos en el solar, pero otro continúa en pie y la grúa ha desaparecido: “Todo apunta a que el problema está ahí, que el gobierno municipal del PP ha adjudicado una obra sin ser el titular de todo el suelo, y si esto fuera así estaríamos en presencia de una irregularidad importante”, previene la portavoz y concejala socialista Estrella Gordillo.
El PSOE dice estar de acuerdo con el ensanche de la calle, pero no con la forma en que se está haciendo. A cambio de los 171 metros que la obra proporcionará a la acera, el Ayuntamiento entrega 182.000 euros en metálico a los propietarios, pero además ocho solares de propiedad pública y 130 metros cuadrados cada uno, ambas cosas valoradas en 700.000 euros; y a ello suman 150.000 en gastos de las obras y de licencias, honorarios, estudios, excavaciones arqueológicas, si fueren necesarios etc.. Además de obras de urbanización de la calle.
“Más de 850.000 euros para obras cosméticas con el único objetivo de obtener rédito electoral, cuando la prioridad de la ciudadanía es el empleo y no obras de este tipo”, reprocha Estrella Gordillo.