La portada de mañana
Acceder
La guerra entre PSOE y PP bloquea el acuerdo entre el Gobierno y las comunidades
Un año en derrocar a Al Asad: el líder del asalto militar sirio detalla la operación
Opinión - Un tercio de los españoles no entienden lo que leen. Por Rosa María Artal

Fragoso: “El único objetivo de los otros es echar al PP en Badajoz”

Afronta las elecciones con la certeza de que su partido no sólo ganará, sino que logrará la sexta mayoría absoluta consecutiva. Francisco Javier Fragoso, de 44 años, se presenta de candidato a alcalde por el PP en Badajoz. Es su primera cita con las urnas como aspirante a primer edil en la ciudad, no obstante, hace dos años que ejerce como tal después de que Miguel Celdrán abandonara el Ayuntamiento y lo nombrara su sucesor. Se describe como un alcalde hiperactivo y habla con frecuencia de la ilusión que tiene de seguir trabajando por Badajoz.

-Casi todos los candidatos coinciden en que el PP va a perder la mayoría absoluta el 24M.

- El único objetivo común que tienen todos los demás es echar al PP en Badajoz. Digo yo que en algún momento le tendrán que explicar a los ciudadanos porqué es mejor votar a Badajoz en Común que a Recuperar Badajoz o a UPyD. No están explicando nada, están sólo con un objetivo: todo contra el PP. ¿Qué han hecho esos señores en estos años de profunda crisis? ¿Dónde han estado sus propuestas? Vienen ahora a ver si con la marca sacan concejales.

-Uno de los mayores reproches que le hacen es que su grupo gobierna de espaldas a los pacenses, que no hay participación ciudadana.

-No ha habido gobierno más participativo que el que he encabezado yo los últimos dos años. ¿Qué alcalde ha motivado a través de las redes sociales más participación y ha estado en más sitios hablando con más gente que yo? Por ejemplo, hubo más de 40.000 aportaciones al Plan Estratégico. Ahora, participación no significa que un colectivo me tiene que decir lo que tengo que hacer. Participación significa que yo escuche a todo el mundo, pero cuando las opiniones son divergentes, quien decide lo que se hace es a quienes los ciudadanos han dado su confianza. Además, mi partido tendrá también derecho a opinar, porque mi partido será probablemente la asociación más grande de Badajoz. Más de 3.000 afiliados pagando cuotas. Yo acepto el diálogo, no las imposiciones. Y menos si detrás hay intereses particulares, económicos o electorales.

-Hablemos del programa. Lleva, de nuevo, la construcción de una piscina en la margen derecha, que ya se anunció en 2011. ¿Cree que los ciudadanos se cansan de promesas no cumplidas?

-No, porque los ciudadanos saben que el PP ha cumplido casi el 90% de los programas que ha tenido. Y cuando algo no se ha cumplido se ha explicado. Si sólo me hubieran interesado mis resultados electorales, ya estaría haciendo la piscina, pero la piscina tuvo una reflexión. Cuando evaluamos cuánto costaba (algo más de dos millones), pensamos que invertir ese dinero para que se use sólo dos meses y medio al año era una exageración. Y vi que había poblaciones que tenían una piscina de uso polivalente, que en invierno se usa como piscina cubierta. Vale el doble, cuatro millones. Y va a ser la única piscina cubierta de 50 metros en 200 kilómetros a la redonda.

-Se puso la primera piedra en la Plataforma Logística y no ha habido más avances. ¿Qué sensación cree que tienen los ciudadanos cuando ven que los proyectos se estancan?

- Lo que saben los ciudadanos de Badajoz es que la Plataforma Logística ya se va a hacer, que tiene empresa y está adjudicada. Lo que saben es que durante 12 años sólo había una valla. Si lo que le molesta a algunos es que allí se haya puesto la primera piedra… La Plataforma Logística hoy ya es una realidad en la ciudad.

-¿Cuántos parados hay en Badajoz? ¿Qué medidas concretas se van a poner en marcha para frenar el desempleo?

-Puedo decir lo que ya hemos hecho desde que soy alcalde. Cuando llegué, había 21.000 parados, ahora estamos en 18.160. Hicimos un pacto local y hemos invertido unos tres millones de euros. Han pasado 800 personas por la formación del pacto local y el 70% ha tenido inserción laboral. Con las escuelas-taller, más de 250 chavales han tenido formación y el 68% inserción laboral. En todo lo que salga de los fondos europeos, ahí estamos. El propio Ayuntamiento tiene su bolsa de trabajo: más de 4.000 contrataciones a lo largo de estos años. Pero evidentemente el empleo público no es la salida. Tenemos que facilitar que vengan empresas. No sé si ha habido una ciudad en España que en mayor y más profunda crisis económica haya tenido la apertura de un centro comercial de 120 tiendas, otro centro comercial deportivo, y dos más de bricolaje. ¿Resultado? 2.500 personas más de alta en la Seguridad Social y 600 autónomos más.

-Pero los sindicatos denuncian que muchos de los contratos en esos centros comerciales son de tres o cuatro horas, lo que no permite una vida digna. No es el empleo que necesitamos.

-No, pero evidentemente es un empleo necesario, porque es un empleo que nos da posibilidad de tener potencia de negocio, porque gracias a esos contratos de tres o cuatro horas al día, que no es suficiente, hay otros 50 compañeros que tienen contrato a tiempo completo, porque si no la tienda estaría cerrando.

-¿Qué porcentaje de esos contratos son a tiempo completo?

-La mayoría, no lo sé exactamente. Evidentemente es una transición en un modelo que ha fracasado, me gustaría que a esos que tienen contratos de tres o cuatro horas le preguntara si preferirían estar en el paro.

-¿Badajoz ha empezado a salir de la crisis? -Todavía estamos en crisis, pero cuando una ciudad tenía hace algo más de dos años 21.000 desempleados y hoy tiene 18.100, las cosas van un poco mejor

-¿Sabe cuántos usuarios tienen los comedores sociales de la ciudad?

-Ahora mismo de cabeza no se lo puede decir. Lo que sí puedo decir es que el Ayuntamiento ha multiplicado por dos la ayuda a los comedores sociales y al banco de alimentos. Manejamos un 20% menos de presupuesto que hace cinco años y hay un departamento que no sólo no ha disminuido un euro, sino que todos los años la aportación municipal se ha incrementado: los servicios sociales. Y por la información que me llega del banco de alimentos y los comedores, la demanda va bajando poco a poco.

-El PSOE insiste en que usted es de los alcaldes de España mejor pagados.

-Yo cobro 3.200 euros en neto, no más de 5.000 euros como se ha dicho. Yo cobro lo que cobraba el anterior alcalde, que se bajó el sueldo dos veces, y es aproximadamente lo que cobraría si me incorporara a mi antiguo puesto de profesor en la Universidad de Extremadura. En ese debate no entro. Montoro sacó una ley para bajar el sueldo a los alcaldes porque cobraban mucho, yo tenía margen para subírmelo.

-El candidato de Extremadura Unida dice que el Ayuntamiento se ha convertido en un negocio familiar por la entrada en la lista de la hija de Celdrán y la de Villalba.

-Las dos son personas imprescindibles porque yo he decidido voluntariamente meterlas en mi lista y hay que tenerles un respeto. Beatriz Villaba ha sido portavoz en Economía del grupo parlamentario, portavoz adjunta del grupo parlamentario y de varias emisoras de radio. Es licenciada en Derecho y funcionaria de carrera. Leonor Celdrán tiene formación en historia y turismo y experiencia de trabajo social con las mujeres rurales. Ella ha tenido la voluntad de participar en política durante muchos años, y si no lo ha podido hacer era precisamente porque su padre era el alcalde. En mi lista no vienen el marido y la mujer, como hay en varias listas, ni vienen los cuñados para rellenar, como pasa por ejemplo en Badajoz Adelante.

-Que Alberto Astorga no esté en su lista les beneficia, ¿no?

-A mí Alberto me dijo antes de Navidad que había tomado la decisión de no ir en la lista municipal porque entendía que esta etapa en su vida ya no le ilusionaba, tuvo su decisión familiar, y desde ese momento es un tema zanjado. Alberto es una buena persona, buen gestor y buen político.

-¿No cree que se equivocó?

-Hay que juzgarlo con las dos versiones. Ahí hay dos versiones (policía y político) y lo que yo creo es que aquello nunca debió ocurrir, ni es bueno que ocurra.