El PSOE de Don Benito intenta salvar la fusión con Villanueva ofreciendo al PP la alcaldía los dos últimos años de legislatura

La fusión de Don Benito y Villanueva de la Serena pende de un fino hilo tras el resultados de las elecciones municipales, en las que el PSOE perdió la mayoría absoluta y el partido negacionista Siempre Don Benito se alzó como segunda fuerza por delante del PP. Por ello, en las últimas horas se suceden las negociaciones antes del sábado, día de constitución de las corporaciones locales.

El PP se deja querer por el PSOE y por Siempre Don Benito, de manera que está en su mano sacar adelante la fusión, que daría lugar a la tercera mayor población de Extremadura, o abandonarla. El caso es que el PP, que apoyó la unión desde el principio, ahora ha cambiado su discurso e impone nuevas condiciones, que no puso sobre la mesa en la anterior legislatura. Su candidato, Pedro Noblejas, aspira a convertirse en alcalde, a pesar de conseguir solo cinco de los 21 concejales. Además, no descarta volver a repetir el referéndum para preguntar a los vecinos otra vez si apoyan la fusión y, en todo caso, impone como condición que el nombre de la nueva ciudad sea Don Benito-Villanueva, y no Vegas Altas como se había decidido.

Siempre Don Benito ni siquiera se ha sentado a negociar con los socialistas y quiere dar carpetazo a unos de los proyectos más ilusionantes de Extremadura en los últimos años con el argumento de la pérdida de la “identidad” y que la unión beneficiará más a Villanueva.

Y el PSOE, la lista más votada con nueve ediles, intenta salvar el proyecto bajo la premisa de que el 66% de los dombenitenses apoyó la fusión en la consulta popular, el mismo dato que el 28M apoyó las candidaturas de los socialistas y del PP. Este jueves el PSOE ha hecho público el acuerdo que ha ofrecido a los populares después de que en los últimos días se haya difundido por mensajes de whatsapp que el PP se ha levantado de la mesa de negociación con el PSOE y está más cerca un acuerdo con Siempre Don Benito, algo que el PP ha negado.

Reiniciar la fusión con Villanueva

Los socialistas han ofrecido un pacto de gobierno por el que ellos ocuparían la alcaldía durante los dos primeros años de legislatura y el PP lideraría el ayuntamiento los otros dos. La vicealcaldía también se repartiría y las labores de portavocía serían compartidas durante los cuatro años “en igualdad de condiciones”.

El acuerdo también incluye un reparto de concejalías, todas con delegaciones para poder cumplir son las funciones de gobierno. Al PSOE le correspondería Personal, Urbanismo, Servicios Sociales, Cultura e Igualdad, Deportes, Agricultura, Barrios, Tráfico y Seguridad, y Comercio, Empresas y Empleo. Para el PP se reservan Hacienda, Educación, Infancia y Juventud, Turismo y Festejos, Sanidad, Limpieza y Medio Ambiente.

Respecto a la fusión, se admite en el acuerdo la necesidad de introducir mejoras en el proceso “por el buen fin del mismo y en aras de un mejor clima en la convivencia”. Para continuar con la unión será necesario el “suficiente acuerdo entre el PSOE y el PP de Don Benito porque de lo contrario sería imposible que pudiera culminar” y la “concurrencia completa y unánime de ambos partidos”.

También se reiniciará la labor de las distintas comisiones que trabajan en el proceso desde el 21 de febrero de 2022, esto es, desde el día siguiente a la consulta popular. Del mismo modo, el borrador del convenio de fusión será redactado con la participación y el acuerdo de ambos partidos con el compromiso de concluir el proceso de fusión a lo largo de la legislatura. Respecto al nombre del municipio resultante de la fusión, se someterá a los “análisis correspondientes” para que haya una propuesta única y acordada entre PSOE y PP de Don Benito. 

El alcalde en funciones de la localidad, José Luis Quintana, ha explicado que los episodios de crispación vividos en la ciudad durante los últimos meses, junto al escenario resultante de las elecciones municipales, apremian a trabajar por un gobierno estable y con total capacidad de gestión de los asuntos del municipio para evitar el “riesgo de una involución política”.