El grupo parlamentario socialista ha impedido este jueves, con sus votos en la Asamblea de Extremadura, una reforma de la ley electoral que rebajaría del 5% al 3% el umbral para conseguir diputado, y además se elegirían con un sistema proporcional puro de manera que beneficiaría a los partidos menos votados.
La propuesta de reforma, presentada por IU, ha conseguido el voto del PP y los regionalistas de PREx-CREx, pero al oponerse el PSOE y no reunir por ello la mayoría de tres quintos de la Cámara necesaria para leyes tan importantes, no tiene validez.
Los populares habían intentado añadirle al texto una rebaja en el número de diputados de la Asamblea, de 65 a 45, y la implantación de listas abiertas; no llegaron ni siquiera a incorporarse por el rechazo en bloque de los tres partidos de oposición.
La socialista Ascensión Murillo ha razonado la negativa decisiva de su partido en que no se pueden cambiar las reglas de juego a menos de 12 meses de unas elecciones.
El diputado proponente, Alejandro Nogales, de IU, reprocha que PSOE y PP introdujeran en su día el “corsé” de tres quintos de los votos para poder reformar la ley de Elecciones, así como el intento del PP de reducir el número de diputados, que también perjudicaría a las minorías, que tendrían menos opciones.
El regionalista Damián Beneyto culpa de todo al socialista Fernández Vara, de que no haya sido posible tiempo atrás la reforma electoral. “En lo único que estábamos de acuerdo todos era en bajar el umbral electoral del 5 al 3 por ciento pero hasta eso en lo que estábamos de acuerdo se quedó en el cajón”.