Unidas por Extremadura quiere que la Junta evite que las grandes empresas copen los fondos europeos

La portavoz parlamentaria de Unidas por Extremadura, Irene de Miguel, ha exigido “ambición” y “audacia” al presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, para que las grandes empresas no copen el 100% de los fondos europeos de reconstrucción, para impulsar un modelo energético que no convierta a Extremadura en un desierto demográfico y para generar “certeza” a los jóvenes.

“Le pido que corrija, que el futuro de mucha gente de Extremadura depende de que usted no vuelva a cometer errores”, le ha manifestado la diputada en la segunda jornada del debate sobre el estado de la región, en la que le ha reclamado también transparencia y participación social para determinar el destino de estos fondos.

En su intervención le ha reclamado “valentía” para afrontar los retos de la emergencia climática, la transición energética, la transformación digital, el envejecimiento poblacional, la igualdad y la vertebración territorial.

“Si no somos audaces, si no lo afrontamos de forma decidida aflorarán nuevos desequilibrios”, ha advertido De Miguel, para quien es necesario tener un proyecto de región más allá del corto plazo y ha puesto como ejemplo en este sentido al presidente estadounidense Joe Biden.

Ha considerado que los fondos Next Generation deben contribuir a “un cambio de paradigma” en lugar de ser “una suerte de rescate a las grandes empresas” y, en este sentido, ha pedido a Fernández Vara herramientas para evitar que esta ayuda acabe al cien por cien en los bolsillos de éstas para financiar macroproyectos.

En este sentido, De Miguel ha defendido que las pymes, los autónomos y las cooperativas puedan acceder a ellos en “igualdad de condiciones” porque “en estos momentos históricos debemos hacer justicia con el empresariado que tiene responsabilidad social y compromiso con nuestra tierra”.

Además, la portavoz de la formación morada ha instado a Fernández Vara a presentar un nuevo modelo de región para que Extremadura no vuelva a perder el tren, pues “no está en disposición de saltarse ni una parada”, y a impulsar una estrategia “lo más consensuada posible”, desde la eurorregión Euroace, para conocer lo que se quiere hacer en esta década.

Nuevo modelo económico

“Necesitamos un cambio real y profundo y la recetas del pasado no valen”, ha insistido, al tiempo que ha criticado que el jefe del Ejecutivo volviera ayer a hablar de proyectos “del pasado” como la azucarera y el “macrocasino” de La Siberia cuando, en su opinión, los fondos comunitarios deben ir a un nuevo modelo económico.

En esta línea, ha abogado por un modelo de energía renovable que beneficie a la mayoría social a través de comunidades energéticas locales, el autoconsumo, empresas públicas de energía y la recuperación de saltos hidráulicos que ya caducan. Se trata, ha dicho, de aprovechar el potencial de Extremadura sin convertirla en un “desierto poblacional”, como a su juicio está ocurriendo con el despliegue “colonial” de las plantas fotovoltaicas.

De Miguel ha apostado además por impulsar la transformación de los productos en Extremadura y por retener el talento, pero para ello, ha subrayado, es “urgente” solucionar los problemas de comunicación “mirando a todos los puntos cardinales y no solo a Madrid”. “Si en 2 o 3 años no tenemos unas infraestructuras en condiciones, de poco nos van a servir los millones que recibamos de la Unión Europea”, ha advertido la portavoz de UPE, para quien es necesaria la intermodalidad, un fortalecimiento de la media distancia y cercanías, una reestructuración de las líneas de autobuses y un nuevo mapa de movilidad.

También ha pedido mejores infraestructuras y condiciones laborales para los trabajadores del sistema sanitario y ha tenido palabras para los jóvenes, pues “Extremadura no se ha portado bien con la gente joven” porque el Gobierno regional ha sido “incapaz” de generar certezas para este colectivo. “Estos fondos europeos deben mirar hacia ellos”, ha recalcado.

“No desaprovechen esta oportunidad histórica, siéntense con los colectivos, sean audaces, de nada sirven las recetas fallidas de siempre”, ha insistido Irene de Miguel al jefe del Ejecutivo.

Según ha dicho, los objetivos deben ser crear empleo de calidad, generar oportunidades para los jóvenes, poner las bases de un modelo productivo de futuro, fortalecer el tejido económico, afrontar la emergencia climática y seguir avanzando hacia servicios públicos de calidad.