Vox ha presentado una propuesta de impulso en la Asamblea de Extremadura para exigir a la Junta la censura en los colegios e institutos de la región y la implantación del veto parental en las aulas. De esta forma, el partido de extrema derecha, que gobierna en coalición con el PP, obligará a la presidenta, María Guardiola, a posicionarse sobre este asunto después de que negara que estaba incluido en el pacto de gobierno.
En su propuesta, Vox pide a la Junta que revise los currículos educativos y adopte las medidas necesarias para promover la “inmediata retirada” de libros de texto y material educativo “que contengan cualquier tipo de adoctrinamiento o contenido potencialmente dañino que pueda afectar a la inocencia de los menores”.
Además, el partido de Santiago Abascal quiere que se garantice el “conocimiento previo y aceptación de los padres de cualquier contenido afectivo-sexual o ideológico que puedan recibir sus hijos en el aula”, o, lo que es lo mismo, que la Consejería extremeña de Educación implante el veto parental.
Sin embargo, María Guardiola rechazó el pasado jueves llevar esta medida a las aulas de la región porque no formaba parte, según dijo, del pacto de gobierno del PP y Vox en Extremadura. Pero en el punto 32 de ese documento ambos partidos se comprometieron a garantizar la “neutralidad ideológica” de la enseñanza y fomentar la igualdad de oportunidades asegurando la libre elección de centro en todas las etapas educativas, así como el derecho constitucional que asiste a los padres “para que sus hijos reciban la formación que esté de acuerdo con sus convicciones”.
A pesar de ello, la presidenta aseguró que la Junta “garantizará una educación sexual adecuada, sana y respetuosa” después de que la portavoz de Unidas por Extremadura, Irene de Miguel, reclamara una educación afectivo sexual en las aulas a partir de los tres años y recordara los casos de los falsos desnudos de niñas en Almendralejo y el de la menor agredida sexualmente por tres compañeros en un colegio de Montijo, ambas localidades en Badajoz.
“Nosotros queremos una Extremadura feminista y que combata palmo a palmo y sin descanso la violencia machista en cualquiera de sus formas”, resaltó Guardiola, además de criticar que la líder de la coalición de izquierdas utilice estos casos para “frivolizar” y “hacer regate corto en lugar de arrimar el hombro”.
Será en el próximo pleno, previsto para el 19 de octubre al ser el 12 festivo, cuando la presidenta de Extremadura y los diputados del PP se tengan que posicionar sobre la censura en los colegios y la implantación del pin parental, como exigen sus socios en el Ejecutivo, o supondrá un nuevo enfrentamiento entre la derecha y Vox a escasos días de que se celebren los 100 días de gobierno.