La protección económica cuando se acaba en el paro se ha ido reduciendo en los últimos años en España, y aunque en Extremadura es de menor cuantía que la media, porque sueldos y cotizaciones son inferiores, la Comunidad presenta dentro de lo malo la segunda mayor tasa de cobertura nacional, el 36%, tras la de Rioja que es casi el 40%, ambas afortunadas frente a la media nacional que es el 27,8%.
En los pasados ejercicios, y especialmente tras la política de recortes de 2012, el número de desempleados que tienen algún tipo de prestación económica alternativa por parte del Estado se ha ido reduciendo; alcanzó su techo precisamente ese año 2012, pero luego el agotamiento de los plazos de derecho ha hecho disminuir ese porcentaje de parados, en un 15% en la región según los datos del Sexpe, que son más optimistas que los de la EPA.
Desde 2010 el gasto por persona ha caído en Extremadura un 13,8% en términos nominales frente al 11,4% de la media española, según un informe de Comisiones Obreras. Esta reducción se debe a la pérdida de calidad del sistema, ya que las prestaciones de mayor cuantía pierden peso a favor de las asistenciales y también a que la prestación contributiva se ha visto mermada por la caída de los salarios y por los recortes del Gobierno aplicados al sistema.
El real decreto ley 20/2012 de 13 de julio modificó el porcentaje para el cálculo de la prestación a partir del séptimo mes, reduciéndolo del 60% al 50% de la base de cotización. Estos diez puntos equivalen en realidad a una reducción del 16,7% en la cuantía de la prestación según ese sindicato.
La paga media
En 2010 un español con derecho a una prestación contributiva (la que se genera según el tiempo trabajado con anterioridad) recibía de media 830,7 euros al mes (agosto); en 2015 ya solo recibe 784,2 euros, lo que supone una pérdida de 46,5 euros equivalentes al 8% nominal.
En Extremadura la situación es aún peor porque la prestación media es mucho menor, no llegando a 750 euros en 2010 y habiéndose reducido 693,3 a euros al mes en agosto de 2015, un 7,4% menos en términos nominales.
Esa prestación contributiva, que es la más generosa, ha ido cediendo paso una vez agotada (dura dos años como máximo) al subsidio, en el que habitan el doble de parados con prestación que en la situación previa contributiva, o a la renta activa de inserción y programa de activación de empleo
En 2009, treinta y una de cada cien personas en paro cobraba una prestación contributiva. En 2015 solo son quince.
El resultado acumulado de los últimos tres años de aplicación del real decreto ley 20/2012 será según CCOO una reducción de 11.500 millones de euros en el gasto para proteger a las personas desempleadas en toda España.