Moraleja “no ha dormido, pendiente de los vecinos de la sierra, hemos demostrado ser un pueblo muy hospitalario y la sierra la sentimos como propia”, explica su alcalde César Herrero.
Las donaciones de alimentos y material que pedía el ayuntamiento, en todo un ejemplo de comunicación de crisis por redes sociales, “se multiplicaban enseguida por diez y al poco tiempo teníamos que decir no trajeran más, todo eso en una situación económica nada boyante que le supone más esfuerzo a los vecinos y empresas y particulares; ha participado toda Moraleja y su zona”.
“No hemos hecho más que lo que teníamos que hacer”, explica el comportamiento, que ahora tiene que ser “entre todos ayudar a la sierra”
Para el turismo “es un palo, en Sierra de Gata se acabó el verano, hay que recuperar esa zona que era un tesoro lo antes posible, si puede ser en 10 años mejor que en cuarenta”, reclama este alcalde que a lo largo de tres días se tuvo que conformar con dormir en total cinco horas y media.