Parecía que el Servicio Extremeño de Salud (SES) iba a conseguir la unidad de todos los agentes sociales en torno al pacto para la mejora de las condiciones laborales de la Sanidad, pero a última hora el Sindicato de Médicos (Simex) se ha descolgado del acuerdo, a pesar de que a finales de enero desconvocó la huelga tras arrancar varios compromisos a la Junta.
Este pacto, que incluye unas 400 contrataciones a corto plazo, de las que solo 16 son para médicos, ha sido suscrito por el consejero de Sanidad, José María Vergeles; el director gerente del SES, Ceciliano Franco, y por seis de las siete organizaciones sindicales representadas en la mesa sectorial (CSIF. Satse, UGT, CCOO y UAE).
El acuerdo tendrá un impacto económico de 12 millones de euros para las arcas autonómicas, incluye un calendario para negociar la adecuación de las plantillas a las necesidades reales en función de las cargas de trabajo y no por ratio cama, y una vez que se materialicen todos los puntos que incluye, la tasa de temporalidad pasará del 10-11% al 6%, según Vergeles.
Entre otras medidas, incorpora las “alianzas estratégicas”, para que algunos especialistas cubran dos hospitales sin que suponga “un recorte de plantillas”, ha afirmado el consejero. Además, se crean 16 unidades básica de asistencia (UBA), formadas por facultativo y enfermera, que forman parte del acuerdo con el Simex, ha dicho a pregunta de los medios sobre las críticas de este sindicato a la escasez de médicos a contratar.
Las mejoras introducidas en este pacto harán que los cupos de atención se aproximen a menos de las 1.500 tarjetas sanitarias que reclamaba la organización de médicos, que no es el único sindicato que representa a los facultativos en la Mesa Sectorial de Sanidad, ha precisado Vergeles.
Mayores salarios
El pacto, que incluye nuevas categorías profesionales, aumentará el “complemento de atención a la continuidad” de los turnos rotatorios de noche un 5 % este 2023, que cobrarán ya en marzo, según Emilia Montero (CSIF), y otro tanto el año próximo hasta llegar al 10 %. En las zonas de difícil cobertura de la atención primaria, el “complemento de continuidad asistencial” subirá un 20 % este año y un 20 % en 2024 para llegar al 40 %. Vergeles ha apuntado aquí que, como ocurre a nivel nacional, habrá que definir qué se entiende por plazas o zonas de difícil cobertura.
Aunque habrá que negociar cómo se cumple, el pacto incluye la exención de guardias y noches a partir de los 55 años, que tendrá ya una partida el próximo ejercicio, según Felipe Bachiller (UGT); y el “solape” de las enfermeras, es decir, el tiempo que regalan antes o después de su turno en el traspaso de la información clínica.
Gonzalo Gallego, del Sindicato de Enfermería Satse, ha dicho que Extremadura una de las regiones que no reconocía el “solape” y ha desvelado que, mientras se negocia el pacto de jornada, se van a detraer 21 horas a las enfermeras por ese asunto.
Ambas partes han destacado que es un acuerdo de mínimos para mejorar las retribuciones de los trabajadores, sus condiciones laborales y la calidad asistencial, además de las contrataciones inmediatas de personal sanitario, la mayoría, y no sanitario.
El representante de Satse ha puesto el acento en que se ha conseguido una “calendarización”, ya que las comisiones para estudiar las plantillas se tienen que constituir este mes de febrero para que a final de este año haya una propuesta del SES con las plazas a crear por categorías.
A juicio de Ángel Benito, de UGT, es un primer paso para profundizar en unas medidas que afiancen una sanidad pública de calidad y universal.
Victoria González Palomino (UAE) ha destacado que la incorporación del proyecto para que los técnicos en cuidados auxiliares de enfermería (TCAE) puedan hacer cuidados en domicilios para descargar de trabajo los centros de salud.