La asociación Nofumadores exige la reconversión de cultivos de tabaco en Extremadura para luchar contra la adicción

La asociación Nofumadores ha exigido la reconversión de los cultivos de tabaco en Extremadura, región que, en el norte de la provincia de Cáceres, concentra el 98% de las plantaciones de España y registra la mayor prevalencia de tabaquismo del país, como medida “imprescindible para recortar el número de fumadores”.

En un comunicado, la asociación ha alertado de los perjuicios del tabaco, no solo para la salud y el planeta, sino también para los propios agricultores, extendiendo sus efectos nocivos a toda la sociedad. Sin embargo, la industria tabaquera interfiere en los esfuerzos por sustituir estos cultivos por otros “más sostenibles y necesarios” que ayuden a luchar contra el cambio climático y el hambre, ha lamentado.

Asimismo, Nofumadores ha advertido de las “gravísimas” consecuencias que supone la persistencia de este cultivo para todo el país, con millonarios subsidios de dinero público, especialmente en Extremadura, donde se encuentra el 98% de las plantaciones de tabaco.

En este sentido, la presidenta de la asociación, Raquel Fernández Megina, ha declarado que “hasta que no se deje de cultivar tabaco en Extremadura, será imposible recortar el poder de las tabaqueras en la región con mayor tasa de cáncer de pulmón de España”.

Con aproximadamente 8.450 hectáreas de cultivo, España es el sexto productor de tabaco de la UE y el 36 a nivel mundial.

Extremadura agrupa a unas 1.300 explotaciones entre cooperativas y asociaciones que según datos de la Mesa del Tabaco en colaboración con la CEOE, aportan un valor añadido bruto a la economía de 140 millones de euros.

Sin embargo, la incidencia del tabaco en rama en el PIB nacional es “irrelevante” pues representa, según datos del Ministerio de Sanidad, el 0,00046% del mismo, ha afirmado la asociación.

Por otro lado, Nofumadores ha criticado que España no incentiva con alternativas viables y sostenibles a los agricultores de tabaco y ha apuntado que, en el período cubierto por el informe (2014-2020), dentro de las ayudas del fondo FEADER de la Política Agraria Común (PAC), ningún programa de desarrollo rural contenía ayudas específicas para la reconversión del tabaco.

Por contra, mientras que el consumo de tabaco cristaliza en datos de salud preocupantes, las tabaqueras reciben dinero público a través de las subvenciones dadas a los agricultores para que el cultivo de tabaco sea rentable, ha señalado.

Hasta el año pasado, el tabaco extremeño había recibido subsidios provenientes de la PAC por valor de 22 millones de euros.

Ante la situación descrita por la asociación, “Extremadura es la viva prueba de que mantener esos cultivos es garantía de que se siga fumando y la industria salga siempre ilesa a costa de la sociedad”, ha asegurado Megina.

Según Nofumadores, más de 2.000 extremeños mueren al año por enfermedades relacionadas con el tabaquismo y el porcentaje de fumadores de la comunidad está cinco puntos por encima de la media nacional, cerca de cuatro de cada diez personas mayores de 15 años fuma a diario en la región.

Por ello, desde la asociación han hecho un llamamiento al nuevo presidente autonómico que resulte de las recién celebradas elecciones autonómicas para que transforme las subvenciones al cultivo de tabaco en ayudas para su reconversión en cultivos de alimentos.

“No buscamos dejar sin modo de vida a los agricultores extremeños, queremos que se puedan ganar el sustento cultivando alimentos, bienes beneficiosos y necesarios para nuestra sociedad, en lugar de un producto tan pernicioso, desde un punto de vista económico y de salud, como es el tabaco”, ha incidido Megina.