El festival de música rock anunciado este pasado sábado en el Acueducto de Los Milagros de Mérida comenzó con casi 2 horas y media de retraso debido a que no habían tenido tiempo para hacer las pruebas de sonido.
Parece ser que no se quiso dejar nada montado por la noche ya que la semana pasada, la noche anterior al concierto de Gecko Turner, también en el acueducto como escenario, parte del equipo pagado por la Junta fue robado.
Esta vez había al menos 6 guardias de seguridad, lo cual además de innecesario, resultaba un tanto extraño. Hay que señalar que la anunciada fiesta gastronómica no era tal, había 7 puestos, sólo 3 que vendieran comestibles (uno de chucherías, otro de helados y otro de dulces). Ni rastro de tapas ni degustaciones.
Un festival con el que el Ayuntamiento de Mérida contraprogramó al Campamento Dignidad. Para la misma fecha estaba previsto un festival solidario organizado por el campamento Dignidad, que iba a contar con el grupo Reincidentes.
El Campamento explicaba semanas atrás que desde el consistorio se les ha boicoteado repetidas veces para impedir que lo llevaran a cabo, llegando a pedirles 1600 euros por alquilar la Institución Ferial de Mérida (Ifeme) para este acto de carácter solidario.
3 conciertos y parón por la lluvia
A las 16:30 empezó el certamen de rock junto a las ruinas romanas. El primero de los conciertos, de la banda de rock emeritense Alter Road, que interpretaron temas del EP (https://www.youtube.com/watch?v=ma5Jb3xQQHM&feature=youtu.be). Un disco que presentarán en junio, además de una versión de Foo fighters.
Debido a problemas técnicos, la organización recortó su actuación y sólo pudieron tocar 15 minutos. Pese a ello demostraron su potencia sobre el escenario y la calidad de su sonido. Los dos siguientes grupos, Mnemofobia (Heavy/ Thrash Metal) y Azors (Heavy) si pudieron actuar el tiempo previsto, realizando grandes actuaciones. A las 18:30, ante la amenaza de lluvia, se hizo un parón.
Se hablaba de trasladar el evento al Ifeme. Se podría haber cubierto el escenario con una lona pero tampoco se hizo.
Llamaba la atención la nula capacidad de reacción del ayuntamiento su escaso interés por salvar el evento. Las horas pasaban y el público continuaba sin recibir noticias.
Cabe preguntarse por qué no actuaron los grupos programados (que estaban deseando tocar), ya que desde las 19,00 horas apenas chispeó. A las 20,30 un trabajador se encargó de secar el escenario y la batería.
El público esperaba que se retomaran ya los conciertos. Un gran grupo de personas se reunieron en torno al ‘backstage’ donde lucía un coche de lujo, para conseguir algo de información.
Se comentaba que podían tocar solo los Mojinos Escozíos para finalizar el evento, de forma que cuando pasadas las 22,00 éstos se subieron al escenario, todo el mundo pensaba que iban a tocar, sin embargo el ayuntamiento anunció que lamentaban suspender los conciertos (pese a que no había vuelto a llover ni había previsión de lluvia hasta 2 horas después).
Tras casi 4 horas esperando, la gente tuvo que irse a casa. Hay quien se pregunta porque estando el escenario montado, el grupo contratado (12.000 euros) y el equipo pagado, no se aplazó el concierto para el domingo al mediodía, dado que según las previsiones no iba llover (y así fue).
Los otros conciertos previstos para la noche se realizaron en el Bujío de forma independiente al ayuntamiento, por iniciativa de los propios grupos, que no quisieron dejar al público tirado y tocaron de forma gratuita durante algo más de una hora cada uno.
Beer to Osos presentó los temas de su reciente disco Para el reloj (https://www.youtube.com/watch?v=KYd4gGjqzMw). La mítica banda madrileña Sublevados, dio un repaso de su repertorio con mucha energía, tocando temas como “Un billete para huir” (https://www.youtube.com/watch?v=1O1onY1ZhN8) y “Nunca” y Bucéfalo cerró una gran noche de rock con canciones como “El embargo” adaptación del poeta Gabriel y Galán (de su disco Jipiando) (https://www.youtube.com/watch?v=gVhBZKDNdNE) y “Manque tú no te lo creas” de Javier Feijoo (del más reciente, XCMLVIII).
La versión del equipo de gobierno del PP
Ni el concejal de festejos ni el ayuntamiento han querido hacer declaraciones sobre la cancelación de los conciertos, no han publicado ningún comunicado ni han mencionado lo sucedido en sus redes. Lejos de eso, sorprende descubrir que el alcalde, Pedro Acedo, publica en Facebook que se ha celebrado el festival “Gastromusic” este fin de semana en Mérida (adjunta una foto del concejal de cultura con el Sevilla (cantante de Mojinos Escozíos) y el perfil del PP de Mérida lo difunde.
Un periódico de Mérida, en su edición en papel previa a las elecciones, afirma que se realizaron 6 conciertos en el Acueducto (algo completamente falso) incluido el de Beer to Osos (que en realidad actuó en el Bujío). Cita también a otro grupo que anunció previamente que no podría tocar en el festival. La información de los grupos que se trasladaron al Bujío también es errónea.
Sorprenden en especial las declaraciones del delegado de festejos, Daniel Serrano al respecto, “nuestro objetivo es dar un impulso necesario y potenciar a los grupos extremeños nuevos” cuando precisamente a esos grupos no se les quiso pagar ni un euro.