La Delegación del Gobierno en Extremadura ha remitido una carta a Junta de Extremadura y al Ayuntamiento de Badajoz en la que les cita a una reunión el próximo 15 de octubre en la sede de la delegación para abordar el protocolo preciso para erradicar el nenúfar mexicano. Según fuentes consultadas por EFE, esta carta, remitida este jueves, refleja que es fundamental y urgente la firma de este protocolo entre la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG) y las otras dos administraciones para realizar las actuaciones necesarias para acabar con la planta invasora, que pasa por la obtención de fondos europeos, ya solicitados por la CHG.
Además, se recuerda que se está a la espera de que llegue en próximas fechas la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) que permita el dragado del río, informe que se estima será positivo. Asegura que el protocolo no supondría además inversión ni para la Junta de Extremadura ni para el Ayuntamiento de Badajoz.
El protocolo incide en que las tres administraciones poseen competencias en esta materia, pues al Estado le corresponde el control de las especies exóticas invasoras presentes en las aguas continentales intercomunitarias o la conservación y protección del agua como recurso, a la CCAA la conservación de la biodiversidad silvestre y de la naturaleza en su territorio, y a los ayuntamientos el mantenimiento de los cauces que discurren por zonas urbanas.
En la carta, se asegura que la problemática de las especies invasoras en los ríos es una cuestión que todas las instituciones consideran compleja, que afecta por tanto a distintas administraciones, una realidad que “ha determinado un complicado escenario competencial”. Por todo ello el protocolo incide en la colaboración y coordinación de las administraciones en aras a la eliminación de esta problemática en el río Guadiana en Badajoz.
Este texto también contempla abordar las medidas a llevar a cabo para minimizar los efectos que producirá el dragado del río en colectivos como piragüistas o pescadores, con una amplia actividad en el Guadiana a su paso por la capital pacense. El protocolo incluye una comisión de seguimiento, mixta y paritaria, que se reunirá al menos una vez al año para impulsar las acciones contempladas o conocer las incidencias que pudieran producirse. La firma tendrá una vigencia de cuatro años.