Centenares de personas, 300 según la Delegación del Gobierno y más de 2.000 de acuerdo a los convocantes, se han manifestado este sábado en Mérida por una sanidad pública, universal y de calidad y para reclamar un sistema digno que atienda a los usuarios con unos tiempos de respuesta adecuados.
La marcha, que ha comenzado a las puertas de la sede central del Servicio Extremeño de Salud (SES), en Mérida, ha sido convocada por el Movimiento “Extremadura por la Sanidad Pública”, una plataforma que engloba a 23 colectivos, ante el progresivo deterioro de la atención.
Tras hacer una parada frente al hospital de la ciudad, donde se ha leído un manifiesto, la manifestación ha concluido ante la residencia oficial del presidente de la Junta de Extremadura.
La protesta ha comenzado a ritmo de batucada y de silbatos y al grito de “sa-ni-dad pú-bli-ca” por parte de los manifestantes, que también han dirigido sus proclamas hacia el consejero de Sanidad: “Vergeles, escucha, el pueblo está en la lucha”.
En las pancartas se podían leer eslóganes como “Privatizar es abandonar”, “La España vaciada está harta de estar callada”, “Suicidios a diario no salen en los telediarios”, “La sanidad no es un negocio”,“No a los recortes” o “Bellotari: de una habitación por enfermo a expulsarnos del sistema público de salud”.
También destacaban las que reclamaban una hospital para la zona de la Sierra de San Pedro. “Estamos a 1h,27m de nuestro hospital”, decía una de ellas.
La portavoz del movimiento convocante, Concha Ortiz, ha declarado a EFE que la clase política debe entender que la ciudadanía quiere tener “un sistema sanitario digno y que nos atiendan en los tiempos de respuesta adecuados”, lo que a su juicio no es una “utopía”, ya que fue una realidad.
Ortiz ha señalado que proponen que se aumente la inversión en atención primaria, que se incrementen las camas hospitalarias y las ratios de personal, además de mejoras en salud mental y en atención a la dependencia, para estar al mismo nivel que hay en Europa.
Ha denunciado que hay mucha falta de profesionales sanitarios, pero ha recalcado que “no es cierto que no haya médicos”, ya que hay más facultativos colegiados en España que nunca, y ha apuntado que puede que se les esté tratando mejor y ejercer una medicina de calidad en otros sitios.
Ortiz ha indicado que esta manifestación es un punto de partida y posiblemente las movilizaciones continúen con concentraciones periódicas en cada centro de salud y en cada consultorio hasta que les escuchen y hasta que se gobierne poniendo la salud de los ciudadanos y su derecho a la asistencia sanitaria “por delante de los intereses y el lucro de las empresas farmacéuticas y de las multinacionales de salud”.
En la marcha ha participado la candidata de Unidas por Extremadura a la presidencia de la Junta, Irene de Miguel, que ha declarado a los medios que la sanidad pública es una “joya” a proteger y fortalecer.
De Miguel ha lamentado que después de que la sanidad ha sido el “colchón” de salvación durante la pandemia, no se ha fortalecido y se sigue debilitando“.
Ha planteado una gestión distinta, con el refuerzo de la atención primaria, con un 25 % del presupuesto total, y disminuir el gasto farmacéutico, que está “por las nubes” en Extremadura.
También se ha mostrado en contra de la privatización encubierta de la sanidad por parte de los socialistas, tanto a nivel nacional como en Extremadura, y ha reclamado una atención de calidad y que se pueda atender a un paciente en un plazo de hasta 48 horas en la atención primaria.
Entre los manifestantes se encontraba también el candidato del PP a la alcaldía de Mérida, Santi Amaro.