Un juzgado madrileño ha condenado a un año de cárcel a Constantín Gabriel Dumitru, el presunto autor del robo de botellas de vino en el restaurante Atrio de Cáceres en 2021, por otro hurto cometido en Madrid en 2019 en una tienda “gourmet” de la que se llevó una botella de whisky valorada en 5.250 euros.
La sentencia del Juzgado de lo Penal número 8 de Madrid condena al acusado a doce meses de cárcel, al apreciar el agravante de reincidencia y la atenuante de dilaciones indebidas en el proceso.
También le condena a indemnizar con 3.720 euros a la tienda y con 1.529 a la aseguradora de la misma, lo que suma el precio de la botella.
La sentencia considera probado que Dumitru cometió el hurto el 7 de mayo de 2019 sobre las 15:55, cuando entró en el establecimiento Lavinia, de la calle Ortega y Gasset, y “con evidente ánimo de lucro” sustrajo de la zona reservada para bebidas de lujo una botella de whisky de la marca Balveine 40 Years Old.
El precio de venta al público de la misma era de 5.250 euros, y nunca fue recuperada, según subraya la sentencia, que sostiene que, en contra de lo dicho por la defensa del acusado, se han practicado pruebas de cargo que indican su culpabilidad, como los vídeos que grabaron las cámaras de seguridad y las declaraciones de los trabajadores de la tienda.
Detalla la sentencia que las imágenes muestran cómo Dumitru entró en esa zona ataviado con un chaleco tipo plumón, manga larga y un gorro de lana, a pesar de que era un mes de mayo, y que aprovecha que el empleado sale para girar la cámara.
Luego se ve “con toda claridad y precisión” cómo alguien que lleva la misma camisa del acusado coge la botella, que estaba más expuesta de lo habitual porque ese día se habían hecho unas fotos.
Por todo ello, y aunque no hay prueba directa de cargo, la magistrada condena al acusado, con la agravante de reiteración por la condena que tiene por otro hurto, y con la atenuante de dilaciones indebidas porque el proceso estuvo paralizado casi dos años por cuestiones no imputables a él.
Durante el juicio el acusado negó que se llevase la botella sin pagar, unas declaraciones realizadas a través de una videoconferencia desde el centro penitenciario de Cáceres, donde se encentra en prisión provisional desde que fue detenido junto a Priscila Lara Guevara por el robo de 45 botellas en el hotel-restaurante Atrio valoradas en 1,6 millones de euros.