Después de que la vicepresidenta de la Asociación de Dietistas y Nutricionistas de Extremadura (AEXDN), Mónica Pérez, y el nuevo presidente de la Federación Regional Extremeña de Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos (FREAPA), Joaquín León, revelaran que las empresas de catering no cumplen con la ley de seguridad alimentaria y nutrición, la Junta de Extremadura ha puesto todo su arsenal en marcha para abrir un plan de inspección y asegurarse de que las compañías cumplen el contrato.
Este código de conducta indica que los menús de los niños deben ser variados, equilibrados y adaptados a las necesidades de cada grupo de edad, y supervisados por profesionales con formación acreditada en Nutrición Humana y Dietética.
Según varios profesionales del sector, muchas empresas utilizan pequeñas triquiñuelas para burlar la ley y abaratar los costes en la producción, incorporando a los menús productos precocinados y fritura, además de postres edulcorados.
En ese sentido, la Consejería de Educación establece unos criterios que las empresas de catering deben comprometerse a cumplir para conseguir la adjudicación del servicio y, en ese proceso, interviene una nutricionista de la Consejería de Sanidad, detallan desde el Gobierno extremeño.
Menús variados que no se cumplen
Según la legislación, los colegios tienen que ofrecer menús alternativos para los comensales con problemas de salud, intolerancia o alergia a algunos alimentos, creencias religiosas u otras circunstancias debidamente justificadas.
Pero, en muchos casos, según denuncian algunos nutricionistas, una cosa es lo que diga la ley y otra muy distinta es lo que se haga en la práctica. “Además de abaratar los costes, si cambias la fruta por un postre edulcorado, o el pescado por frituras, los niños son felices y los padres no se quejan”, denuncia la vicepresidenta de AEXDN.
Por su parte, desde la Consejería de Educación han asegurado a eldiarioex que el uso de productos precocinados se limita a una frecuencia máxima de tres veces al mes.
Menús complementarios para fuera de las escuelas
Para que el conjunto de la dieta de los menores sea adecuada y equilibrada, se informa a las familias sobre los menús que van a tomar y se les orientan con menús complementarios para las comidas que los escolares no realizan en el centro educativo, añade la Consejería en un escrito.
“Todos estos requisitos se establecen de acuerdo con la Guía de Comedores del Programa Perseo y del Documento del Consenso de la estrategia NAOS para la nutrición, actividad física y prevención de la obesidad”.
Con todo, el plan de inspección desde la Secretaría General de Educación ya está en marcha y a los empresarios de los catering escolares sólo les valdrá asumir la ley o asumir las consecuencias de las irregularidades.