Ecologistas pide a las diputaciones que prohíban el uso de glifosato como herbicida

Ecologistas en Acción de Extremadura reclama a las diputaciones provinciales de Cáceres y de Badajoz que prohíban la aplicación de herbicidas químicos para todos los usos no agrarios en los territorios de su competencia, tanto en los espacios de uso público como en las carreteras y las redes de servicio.

Explica que ese producto, presente en la gran mayoría de los herbicidas comercializados, es una sustancia declarada desde 2015 como agente “probablemente carcinógeno para los seres humanos” por parte de la Agencia de Investigación sobre el Cáncer (IACR) de la Organización Mundial de la Salud (OMS). 

Acuerdo en la Asamblea

Los ecologistas les instan a que actúen en consonancia con el acuerdo del 10 de marzo de 2016 del Pleno de la Asamblea de Extremadura en contra del uso de herbicidas químicos para el control de flora espontánea en espacios de uso público.

Ha enviado escritos para pedir que esta práctica sea sustituida por métodos no químicos que no dañen la salud ni el medio ambiente como, por ejemplo, los mecánicos y térmicos que se aplican en la mayoría de los países de la UE y que tienen un mayor potencial de generación de empleo, como ya hacen algunos ayuntamientos de la región.

Una campaña de firmas

Con este mismo propósito, se ha iniciado una petición en la plataforma “change.org” a través de la que se anima a la población extremeña a implicarse en el objetivo de conseguir la erradicación del uso de herbicidas en los terrenos gestionados por ambos organismos.

También reclama a las instituciones provinciales que se responsabilicen de la protección de la salud de las personas que viven cerca o frecuentan los lugares de su competencia donde se realizan tratamientos para la eliminación de las llamadas “malas hierbas”.

Les pide que tomen las medidas oportunas para sensibilizar e informar a la población de los riesgos para la salud y el medio ambiente que supone el uso de los herbicidas químicos, también en lo referente a sus usos agrarios, a fin de fomentar una reducción paulatina de su uso y, mientras tanto, una aplicación en condiciones de seguridad.