Los farmacéuticos extremeños alertan sobre el posible cierre de farmacias en la región

El presidente del Colegio de Farmacéuticos de Badajoz, Cecilio Venegas, ha trasladado la preocupación del sector ante la aprobación del anteproyecto de ley de los Medicamentos y Productos Sanitarios, presentado por el Ministerio de Sanidad, pues, alerta, podría suponer el cierre de pequeñas farmacias en Extremadura como consecuencia de una menor rentabilidad. “La preocupación es fuerte y seria en relación a esta normativa”, ha dicho Venegas en declaraciones a EFE.
A su juicio, “aunque en una ley siempre hay artículos considerados positivos, en este caso alerta la posibilidad de que se lleguen a instaurar subastas, procesos que fueron eliminados, por ejemplo, en Andalucía después de ser implantados, ya que ni se logró el ahorro que estaba previsto ni fue beneficioso para usuarios y profesionales”.
Esta normativa en la comunidad andaluza “provocó unos líos enormes por unos céntimos por cada medicamento”, productos que además tienen en España los precios más baratos de Europa. En su opinión, “es comprensible que el Sistema Nacional de Salud mantenga su compromiso por hacer llegar los medicamentos a toda la ciudadanía, pero todo ello debe siempre acontecer en las mejores condiciones y sin riesgos de desabastecimiento”.
Venegas se ha referido, en este marco, a que en estos procesos puede contarse con “plicas suicidas” a través de precios a la baja por parte de empresas de países extracomunitarios que suministren inicialmente sin problemas estos medicamentos, pero que después no tengan la capacidad suficiente para garantizar la continuidad futura de ese determinado producto, lo cual “provocaría disrupciones”.
El presidente del colegio provincial considera, en este sentido, que esta circunstancia afectaría especialmente a comunidades como la extremeña, donde hay muchas farmacias rurales, pequeñas y a las que “se les debe cuidar y mimar”. A estos establecimientos “no se les puede decir que un mes tendrán un determinado producto, al siguiente otro y al siguiente otro, pues por ejemplo no tienen la capacidad suficiente para disponer de un determinado stock, tanto por su capacidad económica como por el número de usuarios a los que atienden”.
Esta circunstancia llega en un momento donde “en 2024 se cerraron tres farmacias en Cáceres y una en Badajoz” debido a las dificultades para alcanzar la rentabilidad precisa en un entorno como el rural. “El sector tiene vocación de servicio, pero lo que no se le puede decir al profesional es que sea un héroe, que mantenga un negocio sin rentabilidad y sin ayuda”, ha incidido.
0