Los vecinos de Valdecaballeros (1.794 habitantes, Badajoz) y Cañamero (1.634 habitantes, en la provincia de Cáceres) han pasado parte de la tarde del sábado hasta primera hora de este domingo confinados en sus domicilios debido al incendio originado en la central termosolar Casablanca, en el término municipal de Talarrubias (Badajoz).
Una fuga de aceite en estas instalaciones ha sido el motivo que ha provocado el fuego, que los bomberos han tardado más de 12 horas en sofocar. La toxicidad de la enorme columna de humo dio lugar a que el 112 Extremadura pidiera a los vecinos de las dos localidades que permanecieran en sus casas con puertas y ventanas totalmente cerradas.
El Ayuntamiento de Valdecaballeros informó a los vecinos por medio de las redes sociales de que se había producido “un escape de aceite, que al entrar en combustión está generando una columna de humo, que por inhalación directa pudiera resultar tóxico”. “No es previsible que dicha columna llegue a nuestro pueblo, pero de manera preventiva desde Urgencias y Delegación del Gobierno recomiendan a los vecinos mantener las ventanas cerradas y no andar por las calles a ser posible, hasta que den por controlado el incidente”, ha avisado.
El fuego comenzó sobre las 17:30 horas y al lugar se desplazaron tres dotaciones de los parques de Herrera del Duque y Don Benito, además de una unidad de emergencias de Cruz Roja. A última hora del sábado el incendio estaba controlado y perimetrado, y han sido necesarios trabajos de amortiguación y refrigeración a la espera que se consumiera el aceite que había salido ardiendo. Al mismo tiempo, los bomberos han estado pendientes de la disminución de la presión para poder cerrar una válvula de 300 milímetros del ramal por donde había salido el líquido.
Según la web de la empresa propietaria de la central, el Grupo Cobra, tiene una potencia instalada de 50 MW con una producción aproximada de 175 GWh/año. En ella se genera electricidad a partir de la radiación solar, mediante el calentamiento de un fluido térmico (aceite térmico o HTF) hasta unos 390ºC, que, a su vez, calienta agua que al generar vapor mueve una turbina conectada a un generador eléctrico.
Hace cinco años una fuga de 1.000 y 1.500 litros de aceite térmico en una central termosolar de la localidad pacense de Navalvillar de Pela obligó a los vecinos de Madrigalejo (Cáceres) a encerrarse en sus casas con puertas y ventanas cerradas durante dos horas.