La Guardia Civil ha detenido a dos vecinos de Bilbao a la altura de Mérida en la autovía A-66, que llevaban hacia el norte 14 fardos de hachís con un peso de 445 kilos, uno de ellos iba por delante en un coche lanzadera para detectar presencia policial, y detrás iba el otro detenido en un automóvil grande tipo SUV con la droga.
La madrugada del pasado viernes, dentro de los dispositivos de servicio en vías de comunicación para prevenir acciones delictivas, agentes de Unidades de Seguridad Ciudadana (USECIC) de la Comandancia de la Guardia Civil de Badajoz establecieron un operativo en la autovía A-66 dentro del término municipal de Mérida, donde interceptaron un vehículo procedente del sur de la península.
Una vez identificado su conductor, un vecino de Bilbao, se inspeccionó el interior de la monovolumen donde transportaba 14 fardos de hachís que arrojaron un peso de 445 kilos.
Durante el transcurso de la identificación, los agentes pudieron saber que viajaba en connivencia con otro vecino de su localidad que le precedía conduciendo otro turismo, que también fue interceptado en el siguiente punto de verificación.
Éste último, trató de suplantar su identidad facilitando a los agentes los datos de otra persona. Supuestamente, durante el trayecto que realizaban tendría la función de lanzadera para dar seguridad y alertar al conductor del vehículo de carga, de la posible presencia policial.
De la droga intervenida se podría obtener en el mercado ilícito 1.730.000 dosis.
Tras la detención y desarrollo de la investigación, los agentes pudieron averiguar que el hachís intervenido supuestamente tendría como destino su localidad de residencia, Bilbao.
Con las pruebas incriminatorias, se les detuvo instruyéndoles diligencias por delito de tráfico de drogas, así como por la usurpación de estado civil y fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de Mérida quien decretó el ingreso en prisión de ambos.