La metadona ya no se toma en ‘metabuses’, sino en farmacias
Juan consume metadona para combatir el síndrome de abstinencia que sufre tras dejar su adicción a las drogas. Este usuario de la Comunidad Terapéutica Casa Roja de Llerena habla bajo un nombre ficticio para mantener a salvo su intimidad.
Durante un tiempo acudió a los ‘metabuses’ de Cruz Roja instalados en Cáceres. En contra de la opinión transmitida desde la administración, se muestra contrario a recibirla en farmacias, y asegura que muchos de los consumidores que conoce también.
Piensa que su intimidad se reduce porque ahora tiene que acudir a un establecimiento lleno de clientes, donde consume la dosis que le suministra el farmacéutico allí, en presencia del facultativo.
Este hombre, como el resto de personas con una adicción, se siente vulnerable con el cambio. Explica que ahora tiene que acudir por las dosis a un estabecimiento lleno de extraños, y conocidos, con la convicción del rechazo social que supone. Porque según explica los consumidores de heroína siguen siendo unos “apestados” de cara al público. Juan pone de manifiesto que la medida ha sido puesta en marcha, como en otras muchas ocasiones, sin contar con la opinión de los propios usuarios.
Sin embargo la Junta sí defiende sus beneficios. Opina que este cambio permite reforzar los controles sanitarios a los que deben someterse estos enfermos y facilitará su inserción social, al “erradicar la estigmatización y la discriminación que en multitud de ocasiones sufren estas personas”, según explicó el consejero de Salud, Luis Alfonso Hernández Carrón.
250 usuarios ya consumen en farmacias
Unos 250 usuarios ya toman la metadona en las farmacias extremeñas. Son unidosis, líquidas, que les suministra el farmacéutico, y que se preparan en la propia botica. Para los Centros de Desintoxicación de Extremadura (Cedex) las dosis sí se suministran de manera industrial.
Un centenar de farmacias, repartidas por toda la región dispensan una disolución de metadona que elaboran en sus propios laboratorios. El presidente del Colegio de Farmacéuticos de Badajoz, Cecilio Venegas, pone de manifiesto que la nueva medida es beneficiosa, en cuanto que evita someter a los usuarios a un “espectáculo”, en el que permanecen a la espera, en un descampado. Entiende que los ‘metabuses’, instalados en el extrarradio, creaban mayor vulnerabilidad a los usuarios.
El perfil de los consumidores
El perfil de consumidores va desde los 25 hasta los 70 años, y el objetivo del programa es reducir los riesgos para la salud de los consumidores, añade el presidente del colegio de farmacéuticos. Es decir, acuden tanto personas que ya no consumen drogas, y que se enfrentan al síndrome de abstinencia, como aquellos que siguen consumiendo. Al tomar metadona se evita que tengan que delinquir o recurrir a otros métodos para obtener sus dosis.
Además de la pérdida de intimidad, algunos usuarios explican que Cruz Roja no solo les facilitaba las dosis de metadona, sino que también les hacía un seguimiento de su salud, les prescribían otras medicinas, y les facilitaban preservativos y productos para la higiene. También se refieren a la pérdida de puestos de trabajo para los trabajadores de Cruz Roja.
