Minutos de silencio ante un ‘verano negro’ para la violencia machista

Badajoz, Mérida y Cáceres fueron este martes escenario de nuevas concentraciones en contra de la violencia machista.

Allí se concentraron colectivos y representantes públicos en repulsa del brutal asesinato de una mujer en Granada a manos de su marido con un hacha. Los casos no paran de repetirse, y tanto los partidos como el movimiento feminista coinciden en que se trata de un ‘verano negro’ que no debe repetirse más.

Las concentraciones se repitieron por la mañana en Badajoz y Mérida. En la capital pacense representantes de los grupos municipales y el teniente alcalde, Germán López Iglesias, se congregaron junto a otros ciudadanos y colectivos, que portaban emblemas como ‘No es violencia, es terrorismo’, así como mensajes en defensa de un pacto de estado contra la violencia de género.

También en Mérida, donde autoridades y ciudadanos alzaron la voz con mensajes como ‘Cuidado, el machismo mata’. Entre las asistentes, la portavoz de la Junta de Extremadura, Isabel Gil Rosiña, que lamentó que en los últimos días hayan sido demasiadas veces las que han convocado este tipo actos de repulsa contra la violencia a las mujeres, “y esto hay que pararlo”.

“Dejamos mucho que desear si no somos capaces todas las fuerzas políticas de parar esta violencia y firmar un pacto de estado para trabajar coordinadamente”, señaló la portavoz del gobierno de Vara.

Un pacto estatal

El colectivo Malvaluna, presente en el acto de Mérida, aboga por un pacto a nivel estatal que contemple, entre otras medidas, las modificaciones presupuestarias necesarias para incrementar en un 20% las políticas de igualdad y de lucha contra la violencia de género.A su juicio es “lamentable” que las administraciones públicas y los partidos políticos “se limiten a emitir elocuentes declaraciones o a convocar minutos de silencio”, ya que considera que “sus obligaciones y responsabilidades políticas van más allá de eso”.

Malvaluna ve incuestionable que “en la medida en que se han visto reducidos los recursos en políticas de igualdad y se ha apartado a las organizaciones feministas especializadas en la lucha contra la violencia de género de las redes de prevención e intervención, los casos de violencia, lejos de disminuir, han ido paulatinamente aumentando” hasta el punto de que el número de mujeres y menores asesinados o expuestos a la violencia machista “resulta ya insoportable”.

Por la tarde las concentraciones se repitieron en Mérida de la mano de Mujeres Maquinando y en Cáceres, con la Plataforma de Mujeres por la Igualdad.

Para este colectivo son imprescindibles políticas preventivas, educativas, de apoyo a las mujeres y de protección a las víctimas para erradicar la violencia de género. Advierte que el ‘neomachismo’ está más vivo que nunca, mientras la sociedad sigue justificando al agresor.