Los niños y niñas de entre 9 y 11 años comenzarán este miércoles a recibir la vacuna contra la COVID-19, y lo harán en sus centros educativos. Se trata de una decisión que la Junta de Extremadura considera que ayudará a la conciliación de la vida familiar, educativa y laboral, pero a pocas horas de que se inicie todo el proceso aún existen muchos interrogantes entre los padres y madres.
La Consejería de Sanidad “recomienda” que los tutores de los menores no acompañen a sus hijos en el momento de la inoculación, al tiempo que pide que la administración de las dosis fuera de los colegios “sea una excepción”. En este sentido, el Foro de AMPAS de Mérida ha criticado la “falta total de información” de los padres pero también de los centros educativos, que no tienen “ni idea aún de lo que tienen que hacer”, según la vocal del Foro, Flor Calle.
“Lo que más preocupa a las familias es que los menores estén o no acompañados y que se respete la intimidad de los que se vacunen y la de los que no lo hagan porque eso en los entornos escolares puede ser motivo de discriminación”, añade Calle, por lo que asegura que durante el último fin de semana ha sido un asunto que ha generado mucha polémica entre las asociaciones de la capital extremeña. Además, advierte que los menores de edad deben estar acompañados por sus “padres, madres o tutores ante cualquier prueba médica y es algo que a día de hoy tampoco nos aclaran en los colegios”.
Recientemente, desde el sindicato ANPE también han criticado que los centros educativos se conviertan en vacunódromos y se “sobrecargue aún más a los docentes con responsabilidades que no le son propias ni de su competencia”.
Llegan 30.000 dosis
Mientras tanto, Extremadura ya ha recibido 30.000 dosis de la vacuna pediátrica contra la covid-19, de las que 18.000 serán para la provincia de Badajoz y 12.000 para la de Cáceres. Esta primera remesa se distribuye por criterios de población diana entre todas las Comunidades y Ciudades Autónomas y en el mes de enero está prevista la llegada de otra remesa de 1,2 millones de dosis, con lo que nuestro país habrá recibido en torno a 2,5 millones de dosis de vacuna pediátrica de Pfizer/BioNtech a principios de 2022.
El Ministerio de Sanidad recomienda que la vacunación de este grupo de edad comience preferiblemente por las personas de alto riesgo y las cohortes de mayor edad (10 y 11 años). La segunda dosis de la vacuna pediátrica se administrará a las 8 semanas de la primera. Asimismo, señala que la presentación pediátrica de la vacuna Comirnaty (Pfizer/BioNTech) ha mostrado una eficacia frente a COVID-19 sintomático del 90,7% en los ensayos clínicos con niños y niñas entre 5 y 11 años y con una reactogenicidad más baja que en el grupo de 16 a 25 años.
“Máxima tranquilidad”
El portavoz de la Junta de Extremadura, Juan Antonio González, ha mandado un mensaje de “máxima tranquilidad” a los padres respecto a la vacunación contra la covid-19 de sus hijos porque “están en manos de profesionales y no va a haber ningún problema en ese aspecto”. “Para combatir al virus lo mejor que hay en estos momentos es la vacunación y por eso animamos a los padres a que lo hagan”, ha reiterado.
Asimismo, confía en que Extremadura continúe como una de las comunidades autónomas que más altas tasas tiene de vacunación porque eso es lo que permite que, aunque haya casos y suba la incidencia, no haya presión hospitalaria, algo que ha tildado de “buena noticia”.
“Podemos decir, desde la responsabilidad, que el virus está controlado en estos momentos porque está monitorizado, aunque somos conscientes de que la incidencia va a subir posiblemente”, ha recalcado.
Por otro lado, la vacunación pediátrica será uno de los asuntos que se abordará precisamente este miércoles en el pleno de la Asamblea de Extremadura. Por ello, este lunes se han pronunciado los grupos parlamentarios, que de forma generalizada han animado a la vacunación. Pero mientras que PSOE, Ciudadanos y Unidas por Extremadura se han mostrado a favor de que se realice en los centros educativos, el PP ha considerado que debería haberse alcanzado un consenso con docentes y padres.