- Los demandantes fueron expulsados tras ofrecer una rueda de prensa denunciando falta de democracia interna en Podemos Extremadura
La defensa de Podemos ha pedido al Juzgado de primera instancia número 11 de Madrid que declare la nulidad del juicio abierto por la demanda de seis miembros de la formación en Extremadura que fueron expulsados. Afirma que su objetivo “no es otro que dañar la imagen” del partido.
El abogado de Podemos ha presentado un escrito en el juzgado para pedir la nulidad de las resoluciones con las que se admitió a trámite la demanda y se aceptó citar a declarar, entre otros, al líder de Podemos, Pablo Iglesias.
El escrito
En ese escrito, al que ha tenido acceso Efe, se subraya que desde que se celebró la audiencia previa el letrado de los demandantes ha hecho declaraciones en diversos medios de comunicación que “no hacen sino poner de manifiesto el fin espurio” que persiguen los expulsados y que demuestran que la demanda es “un fraude procesal y un abuso de derecho”.
A su juicio, su objetivo es dañar la imagen del partido “mediatizando” el proceso a través de interrogatorios a dirigentes de la formación, cuando ha quedado acreditado que sus declaraciones son “totalmente innecesarias” para la resolución de la controversia.
Juicio aplazado
El pasado martes 17 la jueza del caso aplazó el juicio al no comparecer la diputada de Podemos Gloria Elizo, que estaba citada como testigo, y los demandantes expresaron también su queja por que no hubiera acudido Iglesias, citado como demandado. En el banquillo se sentó como representante legal del partido el abogado José Manuel Calvente, que aportó al juzgado los poderes correspondientes para ello.
Para Podemos lo que pretenden los demandantes con su estrategia es “verter sus proclamas políticas contra el partido”, no defender sus derechos de afiliación. Cita como ejemplo una entrevista en la que el abogado de los demandantes señaló que si se declaraba nula su expulsión del partido, se darían de baja forma inmediata porque estaban “hartos de la hipocresía de sus dirigentes”, o que lo que buscaban era “decirle cara a cara” a Iglesias cuáles son las “vergüenzas” de su partido. Para la defensa de Podemos, pedir que se cite a Pablo Iglesias es sólo un “ardid” para tener con él ese cara a cara y usarlo como “arenga política”.
El origen del procedimiento se remonta a la expulsión de los seis demandantes, junto a otras cinco personas más, por el Comité de Garantías Democráticas Estatal del partido ante las “acusaciones falsas y ataques a diferentes órganos de Podemos” durante una rueda de prensa en Mérida el 27 de julio de 2016, en la que presuntamente facilitaron información reservada y comunicaciones internas.