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Prohibido tener hámsteres

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Llevo meses escuchando bulos y más bulos sobre la recién aprobada Ley de Bienestar Animal. Algunos de ellos absolutamente inverosímiles. Sin embargo, en la era de la desinformación, donde las mentiras, las informaciones sesgadas y las verdades a medias campan a sus anchas, éstos se han convertido en el pan nuestro de cada día. Y con esta ley se ha alcanzado el culmen de la manipulación. 

Especialmente me llama la atención el bulo de que la Ley de Bienestar Animal va a acabar con el mundo rural. ¿En qué línea de la norma aparece esto? ¿Cómo pretenden acabar los malos malísimos de Podemos con la vida en nuestros pueblos? Pues es muy sencillo, porque el lobby cinegético y la derecha, que tan estrechamente van de la mano en los últimos tiempos, han hecho de este texto su ariete para rechazar los avances sociales y su medio para cosechar votos en el mundo rural.

Dicen, el lobby cinegético y la derecha, que la norma atenta contra la caza. FALSO. De hecho, finalmente, y debido a la cesión que ha hecho el PSOE ante ellos, buscando así también rédito electoral, los perros de caza se quedan fuera incomprensiblemente. Atentar contra la caza para las federaciones de caza, la derecha y el PSOE suponía que los canes no estuvieran permanentemente atados o enjaulados y que se persiguiera el abandono. 

Soy consciente de que la mayoría de los cazadores quieren a sus perros. Pero hay quienes no. Y esta ley va para ellos. Para los que no quieren a sus perros y los maltratan. En España se abandonan 50.000 galgos y podencos al año según datos del SEPRONA. El 68 por ciento de los perros que están en las perreras o en protectoras de animales pertenecen a razas que se utilizan en la caza. Intentar evitar el maltrato y el abandono de estos canes es para algunos atentar contra el mundo rural. 

Son ellos, con la presión que han realizado en este sentido, los que señalan a los cazadores, y no nosotras. Son ellos los que con sus exigencias de sacar a los perros de caza los que plantean que la excepción, el maltrato, es la práctica dominante en el mundo cinegético.

Otra forma de atentar contra el mundo rural es decir que, por ejemplo, la norma no va a permitir que se tengan gallinas en un corral o que los perros pastores no puedan seguir durmiendo junto al ganado. FALSO también. Los perros pastores podrán seguir pastoreando como hasta ahora, al igual que se podrán tener gallinas porque ningún animal de producción está regulado por esta norma.

Más bulos. No se podrá tener hámsteres, periquitos o tortugas. Esto es FALSO. Solo se va a crear un registro de animales domésticos. Tampoco se va a prohibir la cría y venta de animales. Solo se regula. Todo el que quiera criar podrá hacerlo, solo habrá que inscribirse en un registro. Se podrá seguir comprando animales en tiendas, pero con lo que sí que acaba esta ley es con la práctica de exponer a los cachorros en jaulas o urnas de cristal. También es falso que se prohíba la participación, por ejemplo, de camellos en las cabalgatas de reyes.

Una cosa que sí que es cierta es que habrá que hacer un curso para adoptar o comprar un perro. Se tratará de un curso gratuito donde se aportarán unos conocimientos mínimos para garantizar el bienestar del animal. Algo que todavía no termino de comprender por qué causa tanto revuelo. También es cierto que no se podrá dejar solo al perro atado o encerrado en casa o en una terraza más de 24 horas. Al igual que tampoco se podrá dejar, por ejemplo, horas y horas dentro de un coche bajo el sol. ¿Por qué? Pues porque tenemos que garantizar que nuestras mascotas, que son uno más de nuestra familia, tengan unas condiciones decentes y dignas. 

Nueve de cada diez personas en nuestro país creen que hay que proteger a los animales y luchar contra el maltrato y el abandono. Nueve de cada diez. Existe un consenso más que generalizado en la sociedad de que hay que tratar bien a los animales. La Ley de Bienestar Animal que acaba de aprobarse nos pone a la vanguardia en este sentido, aunque tengamos una sensación agridulce por la exclusión de los perros de caza. El PSOE tendrá que explicar concienzudamente por qué desprotege a estos animales que también lo necesitan.