Protesta del Campamento Dignidad a las puertas de Endesa contra los ‘abusos’ en la factura eléctrica

El Campamento Dignidad se ha concentrado este miércoles a las puertas de la sede de Endesa en Mérida para reclamar medidas ante la pobreza energética y en contra los “abusos de precios que castigan a la población”.

Ponen de manifiesto que el bono social de electricidad sólo hace descuentos “insignificantes” en las facturas. Defienden que la electricidad debe ser un bien público, “y no una fuente de enriquecimiento”.

Rentas básicas mayores

El colectivo también reclama a la Junta que las rentas básicas para personas desempleadas se igualen a lo que exige la Carta Social Europea (CSE) ya que en España esa renta está cuantificada en 426 euros y Europa la eleva a 663 euros. Tienen previsto enviar una carta a los Grupos Parlamentarios de la Asamblea de Extremadura con esta exigencia, ya que “estamos hablando una renta mínima para sobrevivir”. 

Francisco González, portavoz del campamento, señala a una sentencia del Juzgado de lo Contencioso de Valladolid que avala una reclamación en la que se solicitaba el cumplimiento de la CSE para evitar que se pueda vivir por debajo del umbral de la pobreza. También exigen al Ejecutivo extremeño que se equiparen las ayudas sociales a las de Navarra y País Vasco ante hechos como la subida de la energía eléctrica, que será “especialmente dura”.

Otra de sus reclamaciones pasa por una subida salarial para 2020 y 2021 del 2 por ciento a los sueldos actuales de los trabajadores agrícolas extremeños, visto que el 31 de diciembre de este año termina su convenio del campo.