Reprochan a Confederación que limpie la cuenca media del Guadiana y no aguas arriba, donde el camalote crece

Se trata de aplicar la lógica y entender que todo el camalote que invade manchas enteras del Guadiana en Medellín irá aguas abajo, hacia las zonas que ahora se limpian a fondo. Si el problema permanece descontrolado aguas arriba, la invasión se repetirá a modo de bucle.

Este es el mensaje que transmite la Plataforma SOS Guadiana ante el anuncio de la confederación de que bajará la cota del embalse de Montijo para realizar trabajos de conservación, que incluyen la recogida manual de la planta invasora más peligrosa de Extremadura. Así la orla de la planta situada en las orillas quedará en parte depositada en seco, siendo más sensible a las bajas temperaturas y facilitando su retirada según ha explicado la confederación.

Al mismo tiempo están previstas pruebas para reducir la presencia del nenúfar mexicano en el tramo urbano del Guadiana en Badajoz, lo que permitirá igualmente rematar la limpieza del jacinto de agua que aún pueda quedar.

“El problema crece aguas arriba”

SOS Guadiana continúa rastreando las zonas del río menos accesibles para denunciar que la desembocadura del río Ortigas, en Medellín, ha desaparecido por completo. La imagen es la de un gran mando verde de camalote.

La misma situación más abajo, donde crece de modo “alarmante”, engullendo en algunos tramos hasta el 50 por ciento del río, denuncia el colectivo.

La advertencia que lanzan es que si el pasado año no resultó fructífera la limpieza de la cuenca media, dejando al mismo tiempo llena la zona de Medellín, unos trabajos similares tendrán los mismos resultados: un Guadiana lleno de Jacinto de agua.

Valentín Pozo, SOS Guadiana, explica que ahora lo más urgente es combatir la reproducción vegetativa, porque el camalote sigue creciendo. “Existe mucha desinformación porque no se explica nada a las plataformas ciudadanas. No se dan detalles sobre qué volumen de plantas, de qué forma y cuáles son los objetivos finales de esta retirada”.

Una vez más reclaman un plan de choque y la retirada masiva de la planta, para luego apostar por planes de prevención. Ya sea de la mano de ‘drones’ y patrullas de rivera que retiren las manchas de camalote cuando se reproduzcan.

Una de las cuestiones que ponen encima de la mesa es que la bajada de la cota en el embalse de Montijo puede ser útil para la retirada de las semillas del río, aunque ahora lo urgente es parar la reproducción vegetativa según apuntan los biólogos de la plataforma.

“Recogidas imprecisas”

SOS Guadiana entiende que tampoco resulta ser una solución la adquisición de maquinaria más grande para recoger un volumen superior de camalote porque dichas maquinarias necesitan cierta profundidad. El problema es que “el río Guadiana no se caracteriza precisamente por tener una gran profundidad en sus aguas”.

El resultado, lamenta la plataforma ciudadana, es que se van dejando de nuevo zonas de la cuenca sin recoger el camalote con precisión.