Cobró la renta básica seis meses tras una larga espera, y una maraña de papeles. Renovó la prestación en febrero, y tras cobrarla al mes siguiente por última vez, lleva cuatro meses esperando a que le paguen de nuevo.
La situación de Meca y su familia no ha variado, pero sin embargo los trámites se han congelado. Parece poco tiempo, pero no entra dinero en casa, y cuatro meses es todo un mundo, cuesta arriba y en patines.
Son once personas en casa. De ellos, siete son menores (tiene cinco hijos y dos nietos, el último de apenas unas semanas). Sobreviven básicamente de la caridad, empeñando los pocos muebles que hay en casa. “Esta mañana tenía que comprar leche para mi nieto, no tenía nada, y me eché a la calle a pedir dinero”.
Meca reconoce que está desesperada. Enviudó hace unos años y lleva adelante una familia más que numerosa. Ahora se le ha sumado un nuevo obstáculo en el camino: le acaban de diagnosticar un cáncer, y a finales de mes comenzará las sesiones de quimioterapia. Es decir, no puede trabajar porque acaba de someterse a una operación de la matriz. Pero la renta básica tampoco llega.
“En los servicios sociales nos dicen que la solicitud está en entrada, Ni para bien ni para mal, simplemente que está en trámite”.
“Hay más casos parecidos”
Campamento Digbidad advierte que el caso de Meca no es aislado, y que hay otras muchas familias en una situación parecida. “Las personas que iban a solicitar información sobre el estado de su expediente seguían teniendo la misma respuesta, que estaba en entrada, que la revisión de expedientes va siempre unos días antes a la fecha de solicitud”.
“No dejan entrar a nadie acompañando a quien entra a pedir información, ni a las compañeras que normalmente están allí los lunes haciendo esta labor de apoyo e información ni, incluso a familiares, solo el que pide información, nos comentan que antes había dos sillas y ahora sólo una”, han transmitido a este diario fuentes del campamento.
Manuel Cañada, miembro del campamento, desmiente el último informe sobre el nivel de resoluciones y pagos de solicitudes de la renta básica emitido por el PP antes de abandonar la Junta.
Según este informe, facilitado por la administración al campamento, el número de expedientes resueltos con cargo a la ley de 2013 suman 19.815. Sin embargo, el campamento señala a otro informe anterior, que emitió el director general del Sexpe en agosto de 2014, en el que habla de 14.000 solicitudes estancadas.
Pone de manifiesto igualmente Cañada que a fecha de junio de 2015, con cargo a la ley de 2013, dice que se habían invertido 16 millones, mientras que con arreglo a la nueva convocatoria, la inversión era de 25 millones. El total suma 42 millones.
Frente a esto, apunta que el dinero total presupuestado para los años 2013, 2014 y 2015 ascendía a 63,2, “de manera que hay más de 20 millones que tendrán que gastarse con cargo a ese presupuesto”.
“Ahora más que nunca necesitamos una auditoría social sobre qué ha ocurrido con la renta básica en esta comunidad. La actuación de esta gente (el gobierno de Monago) es delito”, advierte.