La portada de mañana
Acceder
Dos correos tumban la tesis del PP: la Confederación del Júcar avisó del peligro
El cortafuegos de Mazón: dos conselleras en la puerta de salida
Opinión - Rompamos el tabú: hablemos de decrecimiento. Por Neus Tomàs

Guindillas en el culo

Cabreo generalizado con el video elaborado por el PP extremeño, en el que la Extremadura galáctica de Monago se carcajea, desde su superioridad política, técnica y científica, de  tópicos y personajes típicos andaluces, como Lola Flores, Curro Romero, Lopera, la mascota Curro, toro, abanico, la manchega Sara Montiel, el Betis e incluso la Virgen de la Amargura murciana… Los populares andaluces no entienden las razones por las que desde Extremadura incurren en su campaña, torpedeándola con semejante zafiedad. Resulta además grotesco que una Extremadura con los pasillos de los hospitales repletos de pacientes y en la que para una prueba radiológica hay que esperar meses, pretenda dar lecciones a la sanidad andaluza, que en la comparación hasta puede salir airosa. Las redes sociales están sirviendo de correa de trasmisión para propagar el engendro, elaborado por la recién nacida “División de Entretenimiento de la Campaña del Presidente Monago”. ¡Necios hasta para elegir el nombre! Esta “división” multiplica las idioteces de la cuadra y ellos mismos se abren en canal para que, entre las tripas, podamos ver lo ingeniosos y graciosillos que son. El asunto comienza a entenderse cuando trasciende que la batuta del engendro la lleva el “traspolable” Manzano, primo de su primo y para vergüenza de todos, presidente de la Asamblea hasta junio. ¿No se les habrá ocurrido registrar “Gilipollas sin frontera?”. Venga, anímate Monago, te lo regalo.

El candidato del PP en Andalucía, Moreno Bonilla, se ha visto en la necesidad de marcar distancias de la última gracia de Monago con un sosegado “Andalucía no está para bromas”, demostrando un evidente enfado porque sabe que su situación electoral no está para videos de tonterías y que cualquier desajuste desde sus propias filas la puede empeorar aún más. Susana Díaz tampoco ha querido emplearse a fondo con el video cutre, demostrando como presunta agredida bastante más sensatez que el supuesto agresor pero, al paso, le ha dado una colleja: “Monago ha pretendido tapar los puntos que tiene con sus viajes en avión a Canarias”. Pero como en la “División de entretenimiento”  tienen el baile de San Vito,  no pueden estarse quietos. Ni callados, como se lo ha pedido la nívea Cospedal, aunque Monago, igual que hizo con sus viajes gorrones a Tenerife, sigue sin admitir un solo error. Ahora, maldita la gracia que hace, apela al sentido del humor y hasta se compara con los Morancos y José Mota. Durante un mitin en Granada los candidatos populares fueron interpelados por el video de la burla del PP extremeño y después de algunas divagaciones, intentando no entrar al trapo, tuvieron que soltar amarras: “Nada tenemos que decir ni que ver con las gilipolleces del viajero extremeño”. ¡Zas, en toda la boca! Anda Monago, ríete.

El jueves pasado, la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáez de Santamaría, con fuertes vínculos en Extremadura, le comentaba a una amiga que el video de Monago era una injerencia sin justificación alguna, porque, además de mal gusto y carente de gracia, dejaba en evidencia a Extremadura y metía palos en las ruedas del PP de Andalucía. Y sentenciaba: “Lo mejor que puede hacer Monago hasta el 24 de mayo, es estarse quieto y callado”. También podía irse a Tenerife y volver en junio para recoger sus cosas y despedirse de ocurrentes, entretenidos y entretenidas. No lo hará, Monago tiene guindillas y hasta el último segundo seguirá explorando su condición de divo galáctico y  mesías redentor. La criatura va sobrada. ¿Y no tiene a nadie que lo ponga delante de un espejo? No, no lo quieren pero lo aplauden y está permanentemente jaleado por una procesión de besaculos que no dejan de palmearlo con “Monago, tú eres el más grande”. Y él, pobrecito, se lo cree. En apenas tres meses, esos mismos que hoy le lamen las suelas, apuntarán en su “debe” todos los males y, como expertas garrapatas, harán auto-stop hacia otra oreja para seguir chupando. Nos quejábamos porque alguno había perdido la chota después de 24 años de aplausos y ha tenido que llegar Monago, el verso loco-pistacho del PP, para hacerlo bueno, demostrando que se puede llegar a la misma tontuna, incluso más lejos, en solo cuatro años.

Por el video nos enteramos de que, además de un consejero de Recados y otro de Ocurrencias, ahora ha añadido a su séquito el de Entretenimientos, bajo la superior dirección de Manzano. Casi na. El caso es que por videos, aspavientos, rebuznos o estornudos, cada día aportamos una cuota importante a la crónica del disparate nacional. ¿No le dará ni un poquito de vergüenza? Esperemos que en las otras CC.AA no pasen el rasero y sepan distinguir entre Extremadura y   extremeños  de  necios y cantamañanas. Esperemos.

Este y otros artículos de Tomás Martín Tamayo también los puede leer en su blog 'Cuentos del día a día'