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Vecinos de Carcaboso crean una plataforma ciudadana contra el cierre del acceso a la EX-370

Un centenar de vecinos de Carcaboso (Cáceres) han creado una plataforma ciudadana para evitar el cierre durante nueve meses del acceso a Plasencia por la carretera EX-370, motivado por la ejecución de las obras de desdoblamiento de la citada vía.

La denominada Plataforma por la carretera EX-370 ha anunciado que agotará todas las vías legales posibles para que esta decisión no se lleve a cabo, ya que considera que el cierre del acceso a la capital del Jerte perjudicará gravemente sus intereses al obligarles a dar un rodeo de más de 14 kilómetros.

“Este corte tan prolongado significará la asfixia absoluta de las localidades que habitualmente acceden a Plasencia desde esa carretera, ya que para muchos, con contratos precarios en la capital del Jerte, será insostenible el gasto añadido que significará”, ha afirmado el colectivo.

Los vecinos de Carcaboso han mostrado también su preocupación por los retrasos que experimentarán los servicios de urgencias y transportes públicos y escolares para acceder a sus localidades. Según la plataforma, la alcaldesa de Carcaboso, Lorena Rodríguez, se ha comprometido a utilizar “las vías políticas posibles que permitan descartar esta posibilidad” y ha anunciado su adhesión a las reivindicaciones de los vecinos “en caso de confirmarse tal amenaza”. Los vecinos consideran que existen “vías posibles de solución a este conflicto” y han citado la creación de un carril provisional por el cordel que discurre paralelo a la carretera en obras.

Por otra parte, han señalado también que el hecho de que todos los accesos a Plasencia “se habiliten por autovía impedirá que algunos usuarios que hacen este tránsito diario en ciclomotores, coches sin carné, bicicletas u otros vehículos que no pueden circular por vías rápidas se verán privados de esta posibilidad”.

Los integrantes de la plataforma han advertido de que, en el caso de tomarse definitivamente esta decisión, iniciarán “las movilizaciones necesarias para forzar la marcha atrás”. Entre ellas contemplan la posibilidad de ralentizar el acceso a la ciudad por las otras dos entradas “circulando a la velocidad mínima permitida durante las horas punta, lo que supondría grandes atascos a la entrada de Plasencia sin la necesidad de cometer ninguna ilegalidad”, han agregado.