El palacio renacentista del Conde de los Corbos, en el Templo de Diana de Mérida, se abrirá al público próximamente en visitas por turnos ya que tiene un aforo máximo para 50 personas, y tras las obras de restauración llevadas a cabo gracias al proyecto Ciudades Romanas de Extremadura.
Además de la actuación en el Templo de Diana, con este proyecto se ha intervenido en el Pórtico del Foro de la Colonia y se ha reformado el edificio de acceso al recinto monumental del Teatro y Anfiteatro romanos, financiadas todas ellas con fondos FEDER y que suponen un coste total de 653.000 euros.
Así lo ha detallado durante una visita al palacio renacentista la secretaria general de Cultura, Miriam García Cabezas, quien ha precisado que el proyecto Ciudades Romanas de Extremadura se centra en los yacimientos arqueológicos de ocho localidades extremeñas.
Las obras han permitido mejorar el patrimonio cultural y asegurar su conservación, con lo que se mejoran así las posibilidades de su conocimiento y su disfrute, ha apuntado la responsable de Cultura.
Cabezas ha estado acompañada por el director general de Bibliotecas, Museos y Patrimonio Cultural, Francisco Pérez Urban, el alcalde emeritense, Antonio Rodríguez Osuna, y el director del Consorcio de la Ciudad Monumental de Mérida, Javier Jiménez Ávila, quien ha anunciado que las visitas al palacio comenzarán para los emeritenses antes de Semana Santa y que éstas serán gratuitas.
El palacio de los Corbos, que hasta ahora no era accesible al público por su estado “casi ruinoso”, albergará en su planta baja un centro de interpretación sobre cómo ha ido evolucionando el edificio desde la época romana, mientras que la sala superior será para usos múltiples, como conferencias, talleres y otras actividades.
García Cabezas ha indicado que la próxima semana el Consorcio dotará a estos espacios de un mobiliario básico y a lo largo de este año se irá trabajando en el futuro centro de interpretación.
Según ha explicado el arquitecto de la obra, Rubén Cabecera, las dos principales dificultades se hallaron en la accesibilidad al edificio, resuelta con unas escaleras móviles y otra interior colgante del techo, y en la parte estructural, pues las bóvedas se encontraban en estado ruinoso, por lo que se han reforzado con un mortero especial patentado por la Universidad de Extremadura.
Intervención delicada
Además, se ha intentado ser “cuidadosos y respetuosos” con los restos arqueológicos, por lo que se ha evitado el contacto directo con éstos de los materiales, madera y acero, al utilizar elementos de “transición” como grava y una pletina de acero.
Los casi tres metros de altura de la primera planta del edificio se han salvado con una escalera “elevadora” situada en el lateral este, cuyo impacto visual se reduce al ocultarse en un foso perimetral.
Además de la rehabilitación del palacio en el Templo de Diana, desde el “máximo respeto” al aspecto e idiosincrasia del monumento, se ha resuelto el acceso al Pórtico del Foro con una rampa.
Esto, según la secretaria general, servirá para facilitar la accesibilidad a las actividades de este espacio, como talleres, proyecciones de cine y recreaciones históricas, mientras que la observación del monumento se desarrollará como hasta ahora en la calle.
Por otro lado, en el acceso al Teatro y Anfiteatro romanos se ha creado un nuevo edificio que “rehabilita” y “adapta” los anteriores a las necesidades actuales, por lo que se unifica la taquilla de estos monumentos con su acceso, así como la tienda y la oficina de turismo.
García Cabezas ha invitado a “valorar, cuidar y disfrutar” del patrimonio histórico de las ciudades romanas de Extremadura cuyo proyecto contempla una inversión de más de tres millones de euros en actuaciones de mejora para su conservación en yacimientos de Cáceres, Casas de Reina, Don Benito, Medellín, Fregenal de la Sierra y Guijo de Granadilla, entre otros.
Por su parte, el alcalde emeritense, Antonio Rodríguez Osuna, ha afirmado que la obra significa la incorporación del edificio al activo turístico de Mérida y ha felicitado a todos los responsables del proyecto que han hecho que los monumentos de Mérida “estén más vivos” y que hacen “más grande” la capital extremeña.