La Federación Extremeña de Turismo Rural (Fextur) pide a la Junta que tras la reapertura este miércoles de la red de Hospederías públicas, y a tenor del actual momento “tan delicado para el sector, con tantas dificultades para recuperarse”, esos establecimientos “no bajen precios ni efectúen promociones agresivas” a las que el resto de las empresas de la zona no pueden llegar.
En su opinión las hospederías deben buscar diferenciación y no competir con el resto de empresas, y menos a través de los precios.
El resto de establecimientos estarían hoy “en total desventaja competitiva” en cuanto a promoción y comercialización, así como en lo relativo en la transición digital.
Son ocho las Hospederías existentes en Extremadura, siete en la provincia de Cáceres y una en la pacense, que llevaban cerradas desde noviembre pasado.
Durante este tiempo, casi siete meses, y según argumenta Fextur en su defensa propia, los clientes han podido alojarse en el resto de establecimientos y disfrutar de la gastronomía de los restaurantes de la zona, tal y como se ha expresado, dado que “la oferta es suficiente en cada territorio para cubrir la demanda, ya que [las hospederías] nacieron para crear una oferta donde no existía, situación que ”ya ha cambiado“.
Como desventaja de los privados, señalan que las hospederías “se pueden permitir reservar una sola noche, cosa que para el resto de alojamientos no es rentable”.