Anova, Esquerda Unida (EU) y Podemos están más cerca que nunca de presentarse juntos a las elecciones generales de diciembre. Los tres partidos han cerrado un preacuerdo político a cuyo borrador ha tenido acceso eldiario.es y en el que se apela a “profundizar en un proceso de confluencia política” para los comicios y en el que se perfila un “sujeto político soberano” que operará “en todos los planos: político, jurídico, simbólico, comunicativo y organizativo”.
La intención es implicar, principalmente, a las mareas municipalistas pero también otros agentes sociales y políticos de cara a las elecciones generales. El documento recuerda “los espacios de confluencia que cambiaron el panorama de muchos municipios gallegos el pasado 24M”. Precisamente el alcalde de Santiago y coordinador nacional de Anova, Martiño Noriega, adelantó en la Radio Galega que las conversaciones están avanzadas, extremo que han confirmado fuentes de las formaciones implicadas.
“Excepto sorpresas, se podrá anunciar pero no como un acuerdo definitivo y excluyente, sino como garante de la acumulación de fuerzas en la izquierda”, ha asegurad oel regidor compostelano, que quiere “pensar que aun no está cerrada la puerta al BNG”. “A ese pacto le faltan elementos de la izquierda social y de otras fuerzas partidarias y cada paso que se dé no es un movimiento de exclusión, sino que debe ser un movimiento abierto”, ha insistido quien cree que “si hay preacuerdo es que vamos caminando”.
Desde Anova se insiste en que el acuerdo no es ni mucho menos electoral ni de confluencia definitiva de cara a las generales, pero lo enmarcan en la relación más directa y lógica con quienes comparten formación en el Parlamento -como en el caso de EU en AGE- o con quien compartieron espacio en candidaturas ciudadanas, como en el caso de Podemos. “Para nada hay un acuerdo para una candidatura y mucho menos cerrado”, insisten las mismas fuentes.
Por tanto, Anova, EU y Podemos están acabando de definir un preacuerdo político que será hecho público en los próximos días y que pretende ser, fundamentalmente, la base para implicar también a las candidaturas de unidad popular y mareas de las ciudades. Se están “explorando las coincidencias” para un documento que sea la base “programática” con la que puedan coincidir estas plataformas. “No es una coalición de partidos, ni mucho menos”, insisten las mismas fuentes, que advierten que “no se pretende la exclusión del BNG”. “Faltan muchos agentes políticos y sociales por unirse y, fundamentalmente, falta la ciudadanía”, insisten los que ven en ese acuerdo entre fuerzas políticas como el último paso.
El objetivo, insisten, es apelar luego a aquellos partidos que formaron parte de estas candidaturas unitarias como EQUO y Espazo Ecosocialista -que también se incluyen en AGE- y Compromiso por Galicia (CxG), pero también a BNG, que no está dispuesto a incluirse en una candidatura que no sea de obediencia únicamente gallega, al igual que Cerna y el propio Compromiso. Desde Anova se insiste también en que solo participarán en una confluencia “con quien acepte que Galicia es sujeto político soberano” y que esa supuesta candidatura “sólo rendirá cuentas al pueblo gallego”.
Porque ese es el gran obstáculo. El mandato de las bases de Podemos a nivel estatal obliga la esta formación a presentarse con sus siglas, más allá de acuerdos territoriales. Pero el coordinador nacional de Anova, Xosé Manuel Beiras, insistió varias veces en que esa lista única debería respetar a “Galicia como sujeto político” y no ser una “sucursal”. Desde la formación de Pablo Iglesias, se insiste en conseguir ese “sujeto político gallego de cambio” pero también en la “federación” con su partido. La cuestión es cómo solucionar esto y entre las bases de Anova también hay voces que apuestan por un referéndum entre todos ellos para determinar qué tipo de acuerdo se adopta en el caso de apostar por la confluencia con esta fuerza.
Martiño Noriega insiste en “no cerrar el final del partido aún” y recuerda que nunca se acabará de cerrar “la unidad popular si no está la pieza del BNG”. “Todos estos procesos se acaban resolviendo al final, así que yo no vendería la foto fija final”, añade quien cree que “elo importante no es la etiqueta sino el contenido” y que aclara que la denominación de esa candidatura “es una cuestión que aún no está resuelta y en la que hay que trabajar”.
No parece que cause tanta problemática la cuestión del grupo parlamentario propio en las Cortes para algunas formaciones. Tanto Anova como Podemos coinciden en que ese no debe ser el objetivo fundamental ante un régimen “que no vale”, aunque también insisten en que se articularían todos los mecanismos para hacerlo posible, algo que condicionan a una mayoría rupturista en la Cámara y en la Mesa del Congreso. “El grupo propio sin una quiebra del régimen no vale, es preciso un cambio importante de la correlación de fuerzas”, advierten.
El Bloque lamenta el “acuerdo entre cúpulas”
El Bloque, por su parte, manifestó en un comunicado su “sorpresa” por el anuncio del acuerdo “por arriba entre cúpulas de partidos, difundido por la dirección de Podemos de Madrid mientras en Galicia está en marcha un proceso de diálogo entre plataformas ciudadanos, partidos políticos y el conjunto de la ciudadanía para conformar una candidatura gallega de unidad”.
El BNG cree que este “preacuerdo entre cúpulas” supondría “una deslealtad” con todos aquellos que participan “de buena fe” en un proceso de diálogo para un grupo propio “sin supeditación alguna”. “Un acuerdo como el anunciado implicaría un engaño a la ciudadanía por parte de fuerzas políticas que hablan de participación y de espacios de confluencia desde la base, pero que después pactan por arriba en reuniones de despacho”, dice.
“El BNG seguirá sumando esfuerzos con todas las fuerzas políticas sin exclusión alguna, plataformas cívicas y, sobre todo, con la ciudadanía con adscripción política o sin ella, que lleva semanas trabajando para conformar una candidatura gallega de unidad con entidad jurídica propia para las elecciones generales”, dice el comunicado, que anunció su participación en la asamblea de Iniciativa pola Unión, de la que “confía” que “salga un gran acuerdo a favor de una candidatura gallega de unidad, abierta, plural, y sin exclusión ninguna”.