El Ayuntamiento de Sanxenxo critica los planes del Gobierno para trasladar migrantes a hoteles de la localidad

El Ayuntamiento pontevedrés de Sanxenxo no ve con muy buenos ojos la llegada de 350 migrantes procedentes de Canarias y que el Gobierno quiere alojar en hoteles de esta localidad localidad turística. A través de un comunicado el consistorio ha expresado sus preocupaciones sobre la llegada de este grupo de personas que resumen en dos preguntas: cuánto tiempo se quedarán y qué van a hacer mientras estén en las mismas calles que suelen saltar a las portadas de los periódicos cada vez que acogen calurosamente cualquiera de las frecuentes visitas del rey emérito, Juan Carlos I.

La nota difundida por el ejecutivo local que dirige Telmo Martín (PP) acusa al Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones de actuar con “oscurantismo”. En esa nota se asegura que hace unos días llegaron “los primeros rumores” de la intención del Ministerio de trasladar inmigrantes a hoteles de Sanxenxo y que en la jornada del miércoles el delegado del Gobierno confirmó al alcalde, vía telefónica, el alojo de esas personas.

Los primeros175 llegarán el día 1 de noviembre y el resto el 8 de noviembre. Desde el gobierno local se asegura que “desconocen” el tiempo que los migrantes van a estar allí, su situación sanitaria, si van a realizar algún tipo de actividad o aprendizaje y si el Ayuntamiento puede colaborar o hacer algo para atenderles.

Buenas palabras

Además de quejas el comunicado contiene buenas palabras, pero no muchas. Las que resumen el sentir general de los vecinos y del gobierno local de solidaridad con las personas que tuvieron que arriesgar sus vidas en buscar un futuro mejor por las que -dicen- harán “todo lo que esté en sus manos”.

Dicho esto, el comunicado prosigue con la crítica hacia el plan humanitario del Ministerio que en esta localidad costera ven como un “intento de quitarse el problema de encima”. La nota enviada a los medios de comunicación recuerda que en 2020 el ejecutivo de Pedro Sánchez aseguró que el alojamiento en hoteles “era una opción puntual” mientras valoraba otras iniciativas mejores. “Lo cierto es que cuatro años después seguimos igual”, se lamentan en ese comunicado.

En esta línea, ha indicado que “estaban hablando” una organización encargada de acoger a estas personas, pero “no tenían nada cerrado, ni nada en concreto” ya que, primeramente tenían que ver las instalaciones del Monasterio para valorar si eran las adecuadas para realizar esta iniciativa.

Ante esta gestión, el alcalde ha remarcado que es consciente de que “existe un problema migratorio y hay que buscar las mejores soluciones que se puedan de cara a ese problema”.

Rueda, preocupado por cuánto tiempo se quedan y sus características

El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, ha trasladado su desacuerdo con la forma de proceder del Gobierno central. Aseguró que el Gobierno gallego “quiere colaborar” y que la situación es de “emergencia humanitaria”, pero dijo que su equipo no se puso en contacto con los responsables ministeriales para ofrecerse a acoger a parte de los migrantes llegados a las costas de Canarias. Se enteró, como el alcalde de Sanxenxo, por una llamada del delegado del Gobierno en Galicia, que dijo agradecer, pero sobre la que criticó que que la información es “insuficiente”.

Insistió en la necesidad de conocer el tiempo que se van a quedar estas personas migrantes en Galicia y sus características: edad, situación de salud, posibles necesidades concretas, si hay algún menor. Argumentó que requieren esos datos “para poder colaborar”. También cuestionó los criterios de distribución, puesto que las dos localidades a las que van a ser trasladadas estas personas en Galicia son de pequeño tamaño y habrá “una concentración muy fuerte” en esos puntos. Añadió que “se ha empezado a oír” que en el hotel que se ha indicado como alojamiento en Sanxenxo “no está disponible”. El problema, dijo, es “evidente”, pero “no se puede repartir de forma indiscriminada”.

Por el momento, el Gobierno central no ha pedido a la Xunta aportaciones económicas, de lo que Rueda concluye que “lo costea el ministerio correspondiente”. Las cosas “se podrían hacer mucho mejor”, afeó, y comparó el procedimiento con el que se puso en marcha para acoger a las personas que huyeron de la guerra en Ucrania.