Cuarto parto en Verín desde el cierre del paritorio mientras la Xunta ultima su “consentimiento reforzado”

Otro nacimiento en el hospital de Verín. Es el cuarto desde que la Xunta decidió suprimir la atención a los partos y las urgencias pediátricas en este centro sanitario de la provincia de Ourense. En la madrugada del jueves al viernes, una mujer dio a luz una niña apenas una hora después de haber ingresado en el centro. Sin tiempo para ordenar un traslado al Complejo Hospitalario Universitario de Ourense (CHUO), situado a 70 kilómetros, tal y como manda la Xunta.

Madre y hija fueron atendidas por el equipo de matronas y un ginecólogo a la espera de un pediatra que viajó desde Ourense. Pero cuando llegó el doctor procedente de la capital de la provincia, la bebé ya había nacido unos minutos antes. La inminencia del parto había hecho imposible el traslado.

Según confirmó Praza.gal, el neonato fue trasladado en la mañana del viernes al hospital de  Ourense y poco después lo sería la madre. Ha sido el cuarto parto desde que la supresión del servicio del paritorio. El tercero en lo que va de 2020. En dos de ellos hubo comunicación con el juzgado de por medio para evitar problemas legales, dado que el servicio oficialmente está cerrado.

Desde la supresión de la atención al parto en Verín, es la tercera vez que los pediatras no llegan a tiempo de atender el nacimiento, la última de ellas cuando dio la luz una concejala del PP de A Gudiña. Es, también, el segundo parto desde la llegada de la nueva gerente del hospital, Guillermina Agulla, una doctora jubilada recuperada para el cargo con la encomienda de buscar vías para reabrir el paritorio ante las crecientes y constantes movilizaciones vecinales, rectificación que anunció hace una semana para el próximo febrero.

En este mismo período, además, al menos seis madres de la comarca de Monterrei han dado a luz en Ourense o en el Hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo. Todas ellas habrían parido en Verín si el centro contase con especialistas pediátricos.

Consentimiento informado “reforzado” para la reapertura

La ausencia de personal facultativo de pediatría es la razón que ahora esgrime la Xunta para justificar el cierre del paritorio verinés. Antes había apuntado otras, como la falta de pericia de los profesionales, la baja natalidad o supuestas recomendaciones de sociedades científicas.

Pero anunciada ya por parte del Servizo Galego de Saúde (Sergas) la reapertura próxima del paritorio por haber encontrado, dicen, dos pediatras dispuestos a ocupar las dos plazas de interinos que han vuelto a convocar, la Xunta ha advertido de que, para parir en Verín, será necesario un “consentimiento informado reforzado”. Un requisito añadido al habitual que ya ha provocado el malestar de los profesionales del hospital comarcal y las críticas de la oposición.

Ante esas primeras protestas, el Sergas reconoció que ese “consentimiento informado reforzado será una medida específica para el centro verinense”. Fue su gerente, Antonio Fernández-Campa, quien aseguró que ese documento se debe “reforzar en este caso específicamente” para lograr “que la información a madres y padres sea buena” y “no debería generar debate alguno”. No obstante, entre el personal del centro cunde el recelo no sólo por considerarlo un cuestionamiento de su capacidad profesional, sino porque también dudan de su encaje legal.