Alfredo Sánchez Chacón, conocido como el Rambo gallego, ha sido detenido en la madrugada de este jueves en el municipio coruñés de Valdoviño, en la comarca de Ferrol. Llevaba desde marzo del año pasado fugado de la cárcel y oculto, según sospecha la Guardia Civil, en los montes de varios ayuntamientos de la zona en la que ha sido apresado. Cumplía condena por dos delitos, uno de ellos el asesinato a tiros de un joven en Cuntis (Pontevedra) en 2016. Estaba en la cárcel de Monterroso, a la que no volvió tras un permiso hace casi un año.
La jueza ha ordenado su ingreso en prisión, al hacer efectivas las dos requisitorias emitidas por los órganos judiciales tras fugarse. Tras ser detenido este jueves pasó a disposición judicial y ahora, además de continuar con el cumplimiento de su condena, está investigado por un delito de intento de robo y otro de atentado y se le podría investigar por más dado que la sospecha es que está detrás de la desaparición de útiles y alimentos en varias casas en los últimos meses.
La Guardia Civil lo detuvo en torno a las 00,30 horas, cuando estaba intentando entrar en una vivienda en el lugar de O Calvario, en la parroquia de Loira. La subdelegada del Gobierno en A Coruña, María Rivas; el coronel jefe de la Comandancia de la Guardia Civil de A Coruña, Francisco Javier Jambrina, y el agente que arrestó al Rambo gallego, Manuel Vileva, explicaron en rueda de prensa cómo sucedieron los hechos: la propietaria de la casa estaba en el interior con uno de sus hijos y se dio cuenta de que un hombre intentaba acceder al interior. Avisó a Vilela, a quien conoce y que está destinado en el vecino municipio de San Sadurniño. El guardia civil había estado buscando a Sánchez Chacón por el monte esa misma mañana. En ese momento estaba fuera de servicio.
Al llegar a la casa la vecina estaba acompañada por dos de sus hijos. Cuando inspeccionaban la zona, vieron a Sánchez Chacón huyendo por la carretera. Lo persiguieron el agente y los dos hijos de la mujer. El guardia civil hizo varios disparos al aire, aunque sin resultado. Desmejorado y con una cojera, el Rambo gallego, de 63 años de edad, tiró la mochila que llevaba, en la que estaba su tienda de campaña, para intentar correr más rápido- Finalmente lo atraparon. Vilela dijo que, pese al apodo, el hombre “no constituía ningún riesgo para la integridad física de los vecinos” por su edad y su estado y destacó que sus hurtos fueron “famélicos” y que en todo este tiempo evitó el contacto con otras personas. Tras la detención lo llevaron al hospital para examinarlo.
Esta no era la primera ocasión en la que Sánchez Chacón, exlegionario, se fugaba de una prisión y lograba ocultarse y sobrevivir en los montes. Esto es lo que le ha valido el apodo que lo compara con el personaje de las películas de acción estadounidenses. En otras ocasiones terminó por ser localizado en prostíbulos o bares. Entre 1997 y 1999 llegó a estar dos años fugado, después de haberse escapado de la prisión de Vigo descolgándose con sábanas.
Esta última huida por la zona de las Fragas do Eume llega a su fin tras meses de avisos de los vecinos de municipios del área. Notaban que les faltaban objetos como tenazas y comida: pan, chorizos, panceta, cervezas. Hace unas semanas un hombre se encontró en el monte, mientras cazaba, a quien creyó reconocer como el Rambo galego. Estaba en una tienda de campaña. Avisó a la Guardia Civil, pero ya no estaba en el mismo lugar cuando llegaron los agentes. Jambrina dijo este jueves que estaban esperando a que cometiese un error, algo que consideran que hizo al intentar entrar en una casa en la que había gente. Sus robos solían ser en viviendas cuyos habitantes se encontraban fueran.