El mayor grupo de residencias en España, DomusVi, ha apartado a Josefina Fernández como consejera delegada y ha nombrado en su lugar a José María Pena. Josefina Fernández, cuestionada por la gestión de sus centros tras el fallecimiento de 2.000 ancianos en residencias de este grupo el año pasado, pasará a ocupar el cargo de presidenta institucional.
DomusVi enmarca los nombramientos como un “refuerzo” de su equipo en el nuevo ciclo de “crecimiento y transformación” y agradece a Fernández “los grandes logros conseguidos por la empresa durante los últimos 20 años”, según el comunicado difundido este jueves. Sobre su nuevo puesto, el gigante del sector señala que se encargará de representarles “en todas las instituciones nacionales y autonómicas” y compartirá “su dilatada experiencia y conocimientos con el nuevo consejero delegado”. Sin embargo, fuentes del sector aseguran que existía gran malestar por su desempeño al frente de la multinacional.
La ahora ex consejera delegada afirma que está “encantada” de asumir su nuevo puesto: “Una vez llevada la compañía hasta alcanzar su liderazgo en el sector, ahora estoy encantada de asumir esta nueva posición estratégica con el fin de continuar trabajando en la visibilidad y la representación institucional de DomusVi en España, convencida de que es lo mejor para la compañía”, expresa Fernández, según la nota de prensa de la propia compañía. Su sustituto, José María Pena, es un ingeniero de telecomunicaciones con experiencia en SITEL y PROSEGUR.
Polémica defensa de su gestión en el Parlamento de Galicia
La anterior CEO de DomusVi realizó una defensa cerrada de su gestión en noviembre del año pasado en el Parlamento de Galicia. Josefina Fernández descargó todas culpas en las medidas frente a la pandemia del Gobierno de Pedro Sánchez y, en menor medida, en la gestión de algunas comunidades autónomas. La excepción fue la Xunta de Alberto Núñez Feijóo, de la que la empresaria es muy próxima: “No me avergüenza decir que Galicia lo hizo bien”, aseveró en contestación al diputado socialista Pablo Arangüena.
En su reparto de responsabilidades, Josefina Fernández incluso incluyó a los parientes de internos de sus residencias, concretamente los acudieron a la Justicia para denunciar la situación en residencias de este gigante del sector de la geriatría: “Nos costó mucho que las familias entendieran que no podían entrar [en los centros], y es cierto que algunas familias no lo entendieron y ahí es donde hubo más contagios”, afirmó.
La Xunta de Galicia vacunó a la consejera delegada de las residencias DomusVi en enero junto a su hermano en una de sus residencias en Vigo, como reveló elDiario.es. A finales de ese mes obtuvo la inmunización completa con la segunda dosis. Ninguno de los dos figuraba en los primeros listados que DomusVi remitió a la administración gallega reclamando vacunas ni estaba en contacto directo con los residentes.
La mitad de las muertes por COVID en residencias de mayores y dependientes de la Xunta fueron en centros gestionados por DomusVi, según reveló el diario Praza.gal el pasado agosto. Las residencias de titularidad de la Xunta registraron desde el comienzo de la pandemia un total de 80 fallecidos a causa del coronavirus y, de ellas, la mitad correspondieron a centros cuya gestión fue entregada por la administración gallega a DomusVi. Según la información que facilitó a Praza.gal el portal de transparencia del Gobierno gallego, la tasa de mortalidad en residencias a cargo de DomusVi es el doble que en el resto de residencias de titularidad pública, teniendo en cuenta que esta empresa, mayoritaria en el sector, gestiona algo más de un cuarto de los centros geriátricos de Galicia.