Cuatro días después de conocerse los audios en los que se jactaba de blanquear dinero negro, el alcalde de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome, ha comparecido ante la prensa durante hora y media en la que apenas ha respondido preguntas. En la performance no han faltado elucubraciones sobre espías profesionales, inteligencia artificial que emula su voz o una trama de empresarios que ha decidido sacarle de en medio para hacerse con los contratos de agua, basuras y autobuses que el Gobierno municipal debe adjudicar después de las elecciones. Hasta ha habido tiempo para que Jácome compartiera con los presentes un chiste de Eugenio sobre un señor que llega a casa y se encuentra a su mujer con un amante. Lejos de parecer preocupado, el alcalde de Ourense ha iniciado su comparecencia con las siguientes palabras: “No hay mejor forma de empezar la campaña electoral que con tantos medios de comunicación aquí”.
La teoría de Jácome es la siguiente: el Partido Popular, la empresa Copasa y el diario La Región estarían detrás de la publicación de los audios en los que presume de blanquear dinero para financiar a su partido, Democracia Ourensana. El primer edil de Ourense asegura que esas grabaciones se han obtenido tras colocar micrófonos ocultos en el Ayuntamiento: “Es un trabajo de profesionales, calculo que habrá costado entre 200 y 300.000 euros”. Para apuntalar su tésis ha tirado de currículum: “Vengo del mundo del sonido, estudié en Estados Unidos en los 80. Hacía ediciones de audio en Nueva York y flipábamos (...) Sé de lo que hablo”.
Pero la gran pregunta que ha dejado en el aire es otra: “Aquí hai peixe ou non hai peixe?”. Jácome dice primero que no, que todo está sacado de contexto y que las conclusiones periodísticas están manipuladas y distan con la realidad. Dicho en otras palabras, niega haber maniobrado para financiar su partido ilegalmente. Sin embargo, durante el turno de preguntas se le ha pedido qué explique qué parte está manipulada de la grabación en la que se le escucha como explica a su interlocutor su destreza para manejar dinero negro y hacerlo pasar por donaciones ciudadanas. El alcalde de Ourense se ha negado dos veces a responder.
Pese a que todas las miradas están sobre su espalda, Jácome proclama que con él se ha acabado la corrupción y concluye que las próximas municipales se han convertido en Ourense en un plebiscito con dos únicas opciones: o la mafia o Democracia Orensana. “Posiblemente todo esto esté orquestado con el PP y, en menor medida, con el PSOE” ha asegurado para a renglón seguido matizar: “No tengo pruebas”.
En esa línea argumental es donde el alcalde sitúa la importancia de tres grandes contratos que el Ayuntamiento debe adjudicar tras las elecciones: “Tenemos que sacar las tres joyas de la corona: agua, basuras y autobuses”. Ahí es donde ve el germen de la catarata de informaciones que atribuye al cruce de intereses entre la empresa Copasa, el diario La Regíón y el Partido Popular. Durante su intervención de más de una hora Jácome ha relatado el contenido de una conversación mantenida durante una comida con uno de los directivos de Copasa. Lo que sigue es el relato de lo que ese directivo le dijo en esa comida, siempre según la versión de Jácome: “Me dijo: 'nosotros vamos a ir muy fuertes y queremos las basuras el agua y los autobuses'. Me miró a los ojos y me dijo: 'Estamos dispuestos a hacer lo que haga falta'”.
Tampoco han faltado dardos para el periódico La Región, primero en publicar unos audios que posteriormente han empezado a aparecer en otros medios como La Voz de Galicia. Según Jácome la empresa editora de La Región recibía 10 millones de euros del Ayuntamiento de Ourense hasta que la llegada de Democracia Orensana al poder cerró ese grifo: “Editan, adulteran, modifican unos audios y los sueltan en plena precampaña desde el periódico que necesita derribarnos”, ha asegurado durante su comparecencia.
Dispuesto a un pacto con el diablo
Escuchado lo anterior cualquiera pensaría que Jácome descarta ahora un pacto postelectoral con el Partido Popular de José Manuel Baltar, al que responsabiliza de la campaña en su contra. Pero no. Preguntado sobre un virtual acuerdo postelectoral, Jácome asegura: “Pactaré con el diablo si puede ayudar a Ourense. Pactaré con el diablo si consigo el cielo para Ourense”.
Coincidiendo en el tiempo con su comparecencia de prensa, la Fiscalía inició este miércoles una investigación por los hechos, atendiendo una denuncia del PSOE. Paralelamente, el juzgado número 3 de Ourense hacía lo propio e incoaba diligencias tras una denuncia del Bloque Nacionalista Galego (BNG). En la calle, mientras tanto, hay quien ve el lado positivo de lo que está sucediendo. Es el caso de una taxista que traslada a los periodistas desde el Ayuntamiento hasta la estación de tren. Su opinión es la siguiente: “Ha puesto a Ourense en el mapa. Jácome es el mejor de todos con diferencia”.