Alberto Núñez Feijóo ha elegido un monte cercano a Santiago como escenografía del tradicional vídeo de fin de año con el que los jefes de los ejecutivos autonómicos cubren su cuota de pantalla navideña. El presidente de la Xunta aparece en las imágenes caminando hacia cámara por una campo abierto en las inmediaciones del Monte do Gozo, en Santiago de Compostela. Nada que ver con el bar que eligió su homólogo andaluz, Juan Manuel Moreno, ni con los tradicionales escenarios institucionales bajo techo que suelen acompañar este tipo de mensajes a medio camino de la tradición festiva y la publicidad institucional.
Vestido de manera informal, pantalón vaquero y cortavientos con el logo del Xacobeo, sus palabras de ánimo y reconocimiento a otro año duro han finalizado en torno a las esculturas de dos peregrinos que coronan la cumbre de esa pequeña colina desde la que se contempla la catedral de Santiago. Rodeado de personal de enfermería, protección civil y usuarios del sistema gallego de salud, Feijóo ha desgranado argumentos que, en resumen, concluyen que la pandemia es un éxito colectivo de todos los ciudadanos en general y de los gallegos en particular: “Los gallegos somos un ejemplo de resiliencia antes incluso de que se inventara esa palabra”, ha argumentado.
En un día en el que Galicia vuelve a batir un récord de contagios, con casi 6.000 nuevos casos confirmados en solo 24 horas, el jefe del Gobierno gallego mantiene su optimismo sobre la calidad del trabajo de lucha contra la pandemia ejercido bajo su mando: “Todos los gallegos logramos que la tasa de mortalidad sea la más baja de la península y conseguimos reducir el impacto de la pandemia gracias al 'sentidiño'”, ha asegurado.
El barón gallego del PP ha mostrado su confianza en que la recuperación económica llegará en un 2022 que también será año Xacobeo: “Vamos a aprovechar todo su potencial”, ha concluido.