Las monjas del Asilo de las Hermanitas de los Ancianos Desamparados de Lugo han sido fotografiadas esta mañana introduciendo la papeleta en el bolsillo de los usuarios del centro, minutos antes de acompañarles al colegio electoral para ejercer su derecho al voto. Las imágenes, a las que ha accedido en exclusiva elDiario.es, muestran como las religiosas preparan a los ancianos para ir a votar y les acompañan durante todo el trayecto. Algunos van con el voto en la mano y otros lo llevan guardado en la chaqueta. El Partido Socialista ha presentado denuncia ante la Junta Electoral de zona.
La residencia de ancianos está gestionada por las religiosas y ya fue objeto de polémica en 2012, cuando cargos del Partido Popular acudieron a sus puertas para colaborar en el traslado de los mayores a las urnas. En aquella ocasión la denuncia acabó provocando un auto de 2017 que reconocía la existencia de “carretaxe” -acarreo, en su traducción literal al castellano- de cargos del PP de Lugo a personas ancianas con problemas de demencia para llevarlas a votar en las elecciones gallegas de 2012, pero que los hechos no encajaban en los delitos tipificados en la ley electoral. El acusado en aquella ocasión era José Luis Iravedra, por entonces líder del PP en la provincia, y otros tres miembros de la formación política.
Durante aquel proceso se aportó un informe del Instituto de Medicina Legal de Galicia que concluyó que algunos de los ancianos “carecían de capacidad para comprender y decidir el sentido de su voto” a causa de “padecimientos” como demencia senil“ o alzhéimer. A pesar de lo anterior la Audiencia de Lugo archivó la causa contra el criterio de una de las magistradas que emitió un voto particular en el que plateaba la necesidad de seguir con la investigación e imputar a la directora del asilo.
Las imágenes han sido tomadas a las 10:45 de la mañana. Las religiosas y las personas a su cargo ejercieron el voto en el colegio electoral situado en la oficina de recaudación municipal de Lugo.
El Partido Socialista ha llevado los hechos a la Junta Electoral de zona. “Son reflejo de una época que debería estar superada”, dice el texto, “la técnica del carretaxe y 'preparación del voto' infrinje el espíritu de toda esencia democrática [...] y atentan contra los valores básicos de nuestra sociedad”.