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Greenpeace entra en la regasificadora de Mugardos para denunciar la dependencia de los combustibles fósiles

Activistas de Greeenpeace se han encaramado este lunes a lo alto de la planta regasificadora de Mugardos, en la provincia de A Coruña, para denunciar la excesiva dependencia de los combustibles fósiles, frente a otras fuentes de energía limpia. Una veintena de activistas han participado en la acción para colgar un gran cartel sobre uno de los dos grandes depósitos de gas de la planta que procesa el combustible que llega en grandes barcos para su posterior distribución.

La planta de Mugardos es una de las seis que se dedican en España a la actividad de tratamiento y distribución de gas. Ubicada en el interior de la ría de Ferrol, accesible a través de un canal estrecho y en el que la bajamar puede limitar la circulación de grandes buques. La planta regasificadora es propiedad de Reganosa -una empresa participada por la japonesa Sojitz Corporation, que tiene el 15%, y Reganosa Holdco, que posee el 85% restante y está, a su vez, controlada por el Grupo Tojeiro (Gadisa) y la Xunta de Galicia-.

Las instalaciones empezaron a funcionar en 2007. Las características del canal de entrada, la naturaleza inflamable de la carga que portan los barcos y el hecho de que la regasificadora se encuentre cerca de zonas pobladas desencadenó protestas ciudadanas desde que se conoció el proyecto, cuando Manuel Fraga era quien ocupaba la Presidencia de la Xunta.